martes, 5 de febrero de 2019

ADRIANA SALVATIERRA ARRIAZA, PRESIDENTA DEL SENADO DE BOLIVIA, SE IDENTIFICA “PLENAMENTE” CON LA DEMANDA MARÍTIMA


Con el puño izquierdo levantado, la cruceña Adriana Salvatierra Arriaza juró el 18 de enero como Presidenta del Senado de Bolivia para el período 2019-2020. Con solo 29 años de edad, la legisladora del oficialista MAS se convirtió en la parlamentaria más joven en ocupar ese cargo, que además es el tercero en la línea de sucesión después del Presidente y el Vicepresidente. Hija de madre chilena, Salvatierra afirma en esta entrevista con La Tercera que se identifica “plenamente” con la demanda marítima boliviana.
Su madre es chilena. ¿Para usted eso es una complicación en el ámbito político?
No, nunca lo fue, en lo absoluto. Mi mamá llegó a Bolivia, si no me equivoco, en 1986. Mis padres se conocieron en Chile. En la dictadura de Banzer mi papá fue a militar en Chile en el MIR, ahí conoció a mi madre que también militaba en la izquierda chilena. Tuvieron una hija, se separaron durante 13 años, porque el golpe de Estado de Pinochet separó a la familia en ese momento. Mi padre se trasladó posteriormente al exilio en Europa, retornó a Bolivia y aquí volvieron a encontrarse mis padres y a los años nací yo. Mi mamá en Chile era una mujer campesina. En Bolivia, ella siempre lo reconoce, lo valora, mi mamá tuvo la oportunidad de estudiar, oportunidad que quizá no hubiera tenido en Chile, porque el costo de la universidad era inaccesible para ella. Entonces (el ser chilena) jamás significó un conflicto ni para mi militancia, ni para mi identidad ni para mi construcción política.
¿Y cómo la afectó en el fuero interno la derrota de Bolivia en el Tribunal La Haya?
Yo no tengo una diferencia entre mi fuero interno y lo que digo públicamente. Es una demanda legítima, histórica, justa la que tenemos vinculada a retornar a las costas del Pacífico con soberanía. Bolivia nació con acceso a las costas del Pacífico y es legítimo que tengamos aquella reivindicación histórica. Yo me identifico plenamente con la demanda de mi pueblo. Creo fundamentalmente en la justicia, en la verdad histórica y en la razón legítima de los pueblos de buscar soluciones pacíficas, dialogadas a conflictos como este.
¿Entonces usted cree que esto continua más allá de La Haya?
Yo creo que sí, la demanda fue un llamado al diálogo y esperemos que ambos Estados puedan sentarse a dialogar en algún momento. Deseo de todo corazón que las relaciones se restablezcan entre Bolivia y Chile en el marco de la fraternidad. Y espero que, en reciprocidad, así como parlamentarios y ministros chilenos ingresan a Bolivia sin ningún conflicto, cuando pueda retornar a visitar a mi familia, no me pidan visa por mi condición de senadora.
¿Cómo ve las opciones del Presidente Evo Morales de reelegirse en las elecciones de octubre?
Lo único que va a pasar en octubre es que todos los candidatos va a poder presentarse a un proceso electoral. Aquí existen plenas garantías democráticas para que los candidatos puedan participar y disputar el voto.
¿Usted considera legítima la candidatura de Morales?
Por supuesto. La legitimidad emana de los proponentes y los proponentes son los movimientos sociales.
¿Y qué sucede con el referendo de 2016, donde se rechazó modificar la Constitución para permitir otra reelección de Morales? ¿El resultado no lo inhabilita?
No lo inhabilita en lo absoluto, porque el objetivo del referendo era una modificación constitucional y la Constitución no se modificó.
¿Cómo ve las opciones para Morales de un cuarto mandato?
En Bolivia acontece algo que quizá no es extraño con lo que sucede en el resto de América Latina y es que existe una disputa de modelos. Esta es una elección donde la gente elegirá entre dos opciones: si continúa este proceso de cambios o se busca otra vía que pueda ser la regresión, el volver al pasado. La Tercera de Chile (www.latercera.com)





LEAVY CRITICÓ EL SISTEMA DE SALUD DE BOLIVIA: “ES HORROROSO”

El diputado nacional por Salta y precandidato a gobernador se refirió al pedido de reciprocidad que hizo el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales.

El Intra de Argentina (www.elintra.com.ar)
                                                                    
En los últimos días, generó polémica el caso de un músico jujeño que se accidentó en Bolivia y sufrió heridas de diferente consideración, pero tuvo que costear todos los estudios médicos que se realizó. Al respecto, el diputado nacional por Salta y precandidato a gobernador, Sergio Leavy, analizó la situación y pidió dejar de lado la xenofobia. Además, criticó el sistema de salud del vecino país. “Es horroroso”, dijo.  
Según consignó el sito de FM 92.9, Sergio Leavy, diputado nacional, brindó su opinión sobre el pedido de reciprocidad del gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, al sistema de salud de Bolivia tras el caso de un hombre jujeño que se accidentó en el país vecino y debió pagar todos los servicios. El caso generó polémica y abrió nuevamente el debate en la opinión pública, sobre la “reciprocidad entre ambos países en materia de salud”.
El legislador nacional y exintendente de Tartagal, Sergio Leavy, manifestó que hay que dejar de lado la xenofobia, aseguró que la situación es “una campaña de Cambiemos” y destacó al programa Patria Grande, el cual permitió que cinco mil argentinos se operen de cataratas gratis en Bolivia, con el alojamiento y la movilidad incluida. Sin embargo, pidió entender cómo funciona el sistema de salud en el vecino país.  
“Es verdad que en Argentina es totalmente gratis, pero en Bolivia hay que entender que el sistema de salud es horroroso. Con el brote de dengue que tenemos en el sur boliviano, que está apareciendo en el norte argentino, como boliviano tienen que pagar toda su atención y el Estado solo cubre cuando se detecta el dengue, que pueden pasar 40 o 50 días”, indicó Leavy y agregó: “Tenés que entender cómo se mueve ese país que recién está saliendo de décadas de miseria”.
El diputado nacional consideró necesario sacar un seguro de salud al viajar al extranjero, pero que si se quiere cambiar “debe cambiarse la constitución”. Por otro lado, habló sobre la venta de combustible en Bolivia donde el precio es diferente para extranjeros e incluso en muchos lugares no se permite cargar a quienes no son residente del país. “Ahí es donde necesitamos reciprocidad. En salud también, pero hay que entender que no tienen profesional para atender”, dijo.





UNA COMUNIDAD MEXICANA EN BOLIVIA DE LA QUE POCO SE SABE

Con el esfuerzo impecable que caracteriza a la comunidad menonita, los nuevos colonos transformaron su entorno en prósperas regiones agrícolas.

Heraldo de México (www.heraldodemexico.com.mx)

Cuando pensamos en nuestros paisanos en el exterior, la gran mayoría de los mexicanos tenemos en mente a las comunidades de migrantes en Estados Unidos y a sus descendientes.
Muy pocos saben que uno de los movimientos migratorios mexicanos más numerosos, se dio hacia Bolivia, principalmente por parte de comunidades menonitas del estado de Chihuahua.
El arribo de menonitas mexicanos a Bolivia se remonta a los primeros años de la década de 1960, cuando comenzaron a llegar a este país sudamericano alentados por las facilidades que el gobierno boliviano les ofrecía para la ocupación y el cultivo de tierras que entonces se encontraban despobladas.
Es decir, Bolivia requería poblar su territorio más cercano a Brasil por cuestiones de presencia y seguridad nacional. La comunidad menonita mexicana significaba esa presencia, además de un trabajo dedicado, sustentable, productivo y discreto de las tierras.
Con el esfuerzo impecable que caracteriza a la comunidad menonita, los nuevos colonos transformaron su entorno en prósperas regiones agrícolas, que actualmente son ejes de la producción de arroz, maíz, soya, sorgo, girasol y frijol del departamento de Santa Cruz, en el este y noreste de Bolivia.
Hoy, a poco más de medio siglo de distancia, hay más de ocho mil colonos menonitas de origen mexicano repartidos en 66 comunidades.
De hecho, Bolivia es el país que más ciudadanos de origen mexicano tiene registrados entre las naciones de América Latina.
Esta migración es muestra de que por distintas razones, entre las que destacan las económicas, humanitarias, políticas y de reunificación familiar, los humanos hemos migrado de manera constante a través de los siglos.
La migración es un fenómeno intrínseco a la evolución y diversidad del mundo.
Y seguiremos cruzando fronteras nacionales para conocer, estudiar, trabajar, huir, buscar oportunidades y encontrarnos con los nuestros.
A los gobiernos les toca sentar las bases de diálogo, diplomáticas y jurídicas para que la migración se lleve a cabo de manera ordenada y segura, y a los ciudadanos nos toca tener la sensibilidad para entender que a nadie se le debe preguntar su nacionalidad antes de preservársele los derechos humanos.
Ése es el espíritu que anima al Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, un logro histórico de la comunidad internacional, que México suscribió en Marruecos en diciembre pasado y es uno de sus principales promotores. Seis mil millones de personas habitamos este planeta, divididos en 194 países.
La movilidad humana en nuestro mundo post globalizado debe ser administrada con estrategia, sensibilidad y respeto irrestricto a los derechos de todos.
Gran reto en este siglo XXI.





CHILE OFRECE LITIO BARATO A CAMBIO DE FÁBRICAS DE BATERÍAS PARA VEHÍCULOS ELÉCTRICOS

Chile ofrece litio a un precio preferencial para aquellas empresas que presenten una propuesta de inversión más completa en su territorio que incluya una cadena completa de producción de litio para las baterías de los vehículos eléctricos.

Híbridos y Eléctricos de España (www.hibridosyelectricos.com)

La creciente demanda de baterías de litio para alimentar vehículos eléctricos ha convertido este elemento químico en una importante fuente de ingresos para sus principales productores. Chile, que posee una de las mayores reservas de litio del mundo, no quiere ser solo un gran exportador de este material sino que aspira a instalar en su territorio los principales centros de fabricación de baterías para vehículos eléctricos.
Argentina, Bolivia, Perú y Chile tienen el 85% de reservas de litio del planeta, en el área que se conoce como el “triángulo del litio”, formado por el Salar de Atacama en Chile, el Salar del Hombre Muerto en Argentina y el Salar de Uyuni en Bolivia. Chile es el segundo productor mundial, con el 22% de las reservas globales de litio, lo que supone una importante fuente de ingresos para el país. Hasta ahora, solo ha podido exportar el mineral en bruto a países como China o Corea del Sur, donde se fabrican la mayoría de las baterías. Pero durante los últimos dos años, el gobierno ha estado tratando de alentar a los fabricantes a refinar y procesar litio en Chile. 
En 2017 y 2018, la agencia gubernamental de desarrollo de Chile, Corfo, firmo un acuerdo con la principal minera de Chile Albermale, para ofrecer el litio a un precio más barato a las empresas que transforman el litio en Chile. Los ganadores de la primera subasta para comprar este litio, anunciados hace medio año, fueron el consorcio entre el fabricante coreano de baterías Samsung SDI y POSCO y el grupo industrial Fulin Sichuan de China. Un desacuerdo entre Corfo y Albemarle sobre los términos del contrato detuvo el proceso. Ahora que las dos partes han acordado una fórmula para calcular el precio preferencial y la minera negociará los términos exactos de la venta de litio con cada compañía.
Según Sebastián Sichel, vicepresidente ejecutivo de Corfo, se espera que la construcción de las plantas de refinería de litio dure aproximadamente un año. Según Sichel, invertirán más de 750 millones de dólares en instalaciones para transformar las sales de litio —carbonato de litio e hidróxido de litio— en cátodos para baterías de vehículos eléctricos.
En una reciente entrevista, Sichel explicó las intenciones del gobierno respecto a esta estrategia. “Queremos que los fabricantes produzcan parte de las baterías en nuestro territorio. No sabemos si alguna vez fabricaremos los vehículos, pero nos gustaría ver al menos partes de la batería producidas en Chile, o, tal vez, toda la batería", ha afirmado. Actualmente, la mayoría de las instalaciones de fabricación de baterías se encuentran en Asia.
Ahora, Corfo ha firmado nuevos contratos con las empresas mineras más importantes que operan en las salinas del desierto de Atacama, Albemarle y Soc. Química y Minera de Chile, conocida como SQM, en el que se comprometen a vender el 25% de su producción a un precio preferencial. La segunda subasta quedará abierta a finales de marzo para la recepción de las ofertas de las empresas interesadas en comprar el 25% de la producción de SQM. Los ganadores del proceso se anunciarán a finales de año.
En esta segunda oportunidad, “nos han contactado empresas de muchos países, como Italia, Francia, Australia, Alemania y Japón", dijo Sichel. "Está claro que Chile está haciendo una propuesta atractiva para aquellos que desean industrializar el litio", ha añadido. Corfo seleccionará las compañías que ofrezcan una propuesta que incluya las mayores inversiones y que estén dispuestas a construir una cadena completa de suministro de litio y baterías en el norte del país.
El acuerdo permitirá a las empresas acceder al litio al precio más bajo del mercado y mitigar la volatilidad de los precios, dijo Sichel. Según Benchmark Mineral Intelligence, los precios del litio se han triplicado en los últimos cuatro años y estarán bajo presión este año debido a la nueva competencia que llegará al mercado, según afirma el analista del banco de Santander Pedro Miguel Pereira en una nota de investigación.





EL LITIO DE BAJO COSTE DEL SALAR DE ATACAMA ES YA LA MEJOR BAZA DE CHILE PARA ATRAER A LOS FABRICANTES DE BATERÍAS

Revista Motor Pasión de España (www.motorpasion.com)
                                                                                                                
Hace muy poco que la Corporación chilena de Fomento de la Producción, Corfo, firmó un acuerdo con la principal minera de litio, Albermarle Corp. ¿Para qué? Básicamente, para dar a los fabricantes acceso a litio más barato. Chile, que es el segundo mayor productor de litio del mundo quiere atraer a la industria para que fabriquen allí sus baterías para coches eléctricos.
El escenario será el salar de Atacama, el mayor depósito salino de Chile que ya está notando en su fauna y flora el impacto de esta actividad: algunas lagunas y praderas se están reduciendo o secando, mientras que se ha registrado un descenso en la población de flamencos salvajes.
El codiciado oro blanco
Chile quiere convertirse en un centro de fabricación de baterías recargables para vehículos eléctricos, y por eso quiere vender sus enormes reservas de litio a un precio que la industria automotriz y de baterías no pueda rechazar. Según explica Boomberg, el país espera que fabricantes como Samsung SDI y Posco comiencen a instalar plantas de procesamiento de litio a finales de año.
"No sabemos si alguna vez fabricaremos vehículos, pero nos gustaría al menos ver que se produzcan componentes de baterías en Chile, quizá incluso la batería completa", asegura el presidente de Corfo.
La Corporación ha firmado contratos con las dos mineras que operan en el salar de Atacama (Abermale y la Sociedad Química y Minera de Chile o SMQ), que deberán vender el 25 % de su producción a un precio muy competitivo a las compañías que refinan litio en Chile.
El salar de Atacama es el mayor depósito salino de Chile -que a su vez es el segundo mayor productor de litio del mundo- y está formado por una depresión sin salida de aguas que recibe al río San Pedro de Atacama y múltiples quebradas por donde se filtra el agua desde la cordillera.
Forma parte del llamado 'triángulo del litio'​, una zona geográfica ubicada en la punta de América del Sur, en el límite de Argentina, Bolivia y Chile y que con el auge de la electromovilidad se ha convertido en un punto clave para la industria.
Dicho triángulo está compuesto por los salares del Hombre Muerto (Argentina), el de Uyuni (Bolivia) y el de Atacama (Chile) que, junto con otros cercanos, concentran más del 85 % de las reservas de litio conocidas del planeta.
Según datos de Reuters, las exportaciones chilenas de carbonato de litio alcanzaron 949 millones de dólares en 2018 en comparación con los 686 millones del año anterior. Las previsiones auguran que la demanda mundial de litio se cuadruplique para 2025.
Mientras tanto, el Ejecutivo argentino ha estrechado lazos con la minera australiana Enirgi Group para poner en marcha una planta piloto para la producción de litio en El Rincón, un salar al Noroeste de Argentina. Aseguran que tienen recursos para producir 100.000 toneladas durante 80 años.
Según información recogida por El País, la proyección es que la capacidad instalada de Chile será de 142.000 toneladas de carbonato de litio equivalente en 2019 y de 251.500 toneladas en 2022. Argentina, a su vez, alcanzará una capacidad de 95.500 toneladas en 2019 y 331.000 toneladas en 2022.
También Bolivia firmó a finales de 2018 un acuerdo con el Gobierno alemán para la explotación conjunta del litio en el Salar de Uyuni. Según informa Euronews,
"[...] firmó junto a la empresa alemana ACI Systems un acuerdo para crear una sociedad mixta que invertirá 1.200 millones de dólares en la construcción de plantas de hidróxido de litio y de hidróxido de magnesio, así como una planta que abastecerá anualmente baterías a unos 400.000 vehículos eléctricos, todo ello destinado principalmente al mercado alemán".
El coste medioambiental de un mineral estratégico
Debemos partir del hecho de que el litio precisa, al igual que el petróleo, un proceso de extracción que nace a través de pozos, y pasa por un proceso similar al del refino. Sin embargo, se ha comprobado que el bombeo de las salmueras subterráneas hacia las grandes piletas de evaporación tiene un coste operativo menor al de la extracción desde las rocas de pegmatita.
Pero como todo proceso a gran escala, conlleva un impacto. El salar de Acatama es conocido por su población de flamencos salvajes, que se alimentan y reproducen en sus lagunas. Pues bien, la succión de agua de la tierra que llevan a cabo las empresas mineras están acabando con el sustento de estos animales.
Para hacernos una idea, la minera SQM bombea hasta 142 litros de salmuera por segundo.
Algunos científicos están advirtiendo de que, de seguir con los mismos métodos para extraer el agua, todas las formas de vida del Salar serán destruidas.
Ya se está registrando un descenso en la población de flamencos mientras que las imágenes satélite muestran que algunas lagunas y praderas se han secado.
Por otro lado, la Comunidad Indígena Atacameña se ha enfrentado contra la minera SQM por no revelar los efectos negativos que provoca la extracción de salmuera. Además, a nivel social, se alerta de que las provincias sólo reciben una pequeña parte de lo que se produce, ya que muchos salares colindan con asentamientos humanos, y la mayoría son áreas de desarrollo de pueblos campesinos indígenas.





EL LITIO SALTEÑO LLEVARÁ AL PAÍS AL SEGUNDO LUGAR DE PRODUCCIÓN EN EL MUNDO

Desde Nación anunciaron que en 2022 se superará a Chile en extracción del mineral. Existen cerca de 50 proyectos en desarrollo, de los cuales dos empezarían a producir en dos años.

El Tribuno de Argentina (www.eltribuno.com)
                                                                                                          
Con alrededor de 50 proyectos de extracción de litio en desarrollo, de los cuales dos se encuentran en fase avanzada para ya estar en producción dentro de dos años, en Salta están puestas las principales expectativas del Gobierno nacional para que el país se convierta en el segundo mayor productor de ese mineral en el mundo en 2022. La provincia lidera las proyecciones de inversión del denominado "oro blanco", por sobre Catamarca y Jujuy, donde se encuentran las dos únicas minas activas de la Argentina donde se extrae el insumo.
El año pasado Salta encabezó el ranking mundial de anuncios de inversiones para la explotación de litio, con US$ 1.525 millones presupuestados por tres empresas. Se trata de la china Ganfeng Lithium International, que proyecta US$ 675 millones para el Salar de Llullaillaco; la surcoreana Pohang Iron and Steel Company, que anunció inversiones por US$ 450 millones para producir hidróxido y carbonato de litio de material extraído en el Salar del Hombre Muerto, y la francesa Eramet, que confirmó la disposición de US$ 400 millones para los salares Centenario y Ratones.
El subsecretario de Desarrollo Minero de la Nación, Mariano Lamothe, indicó en su reciente visita a Canadá, para la promoción de los recursos naturales locales, que para 2022 se espera "tener una capacidad de producción de 290.000 toneladas anuales de LCE (equivalente de carbonato de litio)".
Australia lidera el mercado del litio, con el 44% de la producción (en ese país el mineral se obtiene de roca). Le siguen los salares de Chile, con el 33% del total extraído, y los de Argentina, con el 13%.
Impulsado por el desarrollo de la industria automotriz eléctrica, la demanda de litio de parte de los productores de esa tecnología (Asia, la Unión Europea y Estados Unidos) creció exponencialmente en los últimos años, al igual que su cotización.
El precio del carbonato de litio para batería creció 168% entre 2010 y 2017. En la actualidad el valor de la tonelada del metal alcalino ronda los US$ 14.000.
Según proyecciones oficiales, en 2023 Salta estará en condiciones de producir 110.000 toneladas de litio, equivalente al 38% de su potencial máximo.
Lo que viene
Está previsto que en 2021 entre en producción en Salta lo que se anunció como la planta de litio más grande del mundo. Las instalaciones están ubicadas en el Salar del Rincón, a 20 kilómetros del Paso de Sico. Está a cargo de Rincón Mining, compañía de capitales canadienses y con base en Australia. Por otro lado, en los salares Centenario y Ratones, ubicados a 150 kilómetros de San Antonio de los Cobres, el grupo francés Eramet anunció que empezará a construir este año las instalaciones para extraer carbonato de litio y proyectan empezar la producción a fines de 2020.
Los proyectos más avanzados
Salar del Rincón Ubicado a 20 kilómetros del Paso de Sico, la planta operada por Rincon Mining estará pleno funcionamiento a mediados de 2021. Se tiene previsto una producción de 25.000 toneladas de litio anuales. Van más de cinco años de inversiones y ensayos técnicos en ese proyecto, que es uno de los más avanzado de la Puna salteña.
Centenario y Ratones Es el segundo proyecto más avanzado de extracción de litio en la provincia. Está a cargo de la compañía francesa Eramet Lithium, que confirmó que este año iniciará la construcción de la planta minera con una inversión de US$400 millones. Esperan producir 20.000 toneladas anuales de litio desde fines de 2020
Diablillos En el Salar de Diablillos, cerca del borde limítrofe con Catamarca, está en fase de evaluación económica previa el proyecto de litio “Sal de los Angeles”. El área está a cargo de las canadienses Lithium-X y Aberdeen International. El lugar tienen un potencial de unos 2,82 millones de toneladas de carbonato de litio.
Gallego En el Salar del Hombre Muerto, la australiana Everlight Resources lleva adelante el proyecto Gallego. Los estudios exploratorios lo confirmaron como uno de los depósitos de litio de mayor calidad en el mundo. En el lugar se proyecta una producción de 8.000 toneladas por año de hidróxido de litio.
Llullaillaco El proyecto Mariana se ubica en el Salar de Llullaillaco. Está a cargo de la china Ganfeng Lithium, que el año pasado anunció inversiones por US$ 675 millones en el lugar. El área de extracción de litio tiene 160 kilómetros cuadrados y abarca estratégicamente uno de los salares más prospectivos en la región.
Lindero Está previsto que el proyecto Lindero, de extracción de oro, empiece su producción a fines de este año. Está ubicado a 75 kilómetros de Tolar Grande. Será la primera experiencia en la provincia de minería metalífera a cielo abierto. Está a cargo de la compañía canadiense Fortuna Silver Mines.
Taca Taca El proyecto Taca Taca, a 34 kilómetros de Tolar Grande, prevé una inversión de US$ 3.000 millones para producir 244.000 toneladas por año de concentrado de cobre, 110.000 onzas por año de oro y 4.100 toneladas por año de molibdeno concentrado. Está a cargo de la canadiense First Quantum Minerals.





OPERARON CON ÉXITO AYER AL MÚSICO MANUEL VILCA
                                                                                                                                                                         
El jujeño accidentado en Bolivia en diciembre tenía aplastamiento de vértebras de la columna y se le puso placas de titanio.

El Tribuno de Argentina (www.eltribuno.com)
                                                                                                            
Manuel Vilca, el músico jujeño que sufrió un accidente vial a principios de diciembre último en Bolivia, fue operado con éxito ayer a la mañana en el hospital "Pablo Soria", y si evoluciona bien sería dado de alta en las próximas 48 horas, aunque su rehabilitación completa llevará unos 45 días.
Según confirmaron fuentes oficiales, el paciente estuvo durante dos horas en la sala de operación y se le colocó en su columna placas de titanio debido a que padecía a fracturas por aplastamiento de la primera vértebra lumbar y la décima segunda dorsal.
Cabe recordar que en torno a Manuel se generó una polémica entre el gobernador Gerardo Morales y autoridades del vecino país, a quienes el mandatario jujeño les reclamó la atención gratuita en materia de salud, tal como ocurre con los bolivianos y otros extranjeros en Jujuy, y también la devolución de lo que pagó Vilca en su internación..
El músico jujeño, que desde hace años se traslada al vecino país por su actividad laboral, tras el accidente estuvo internado semanas en el hospital público de Oruro y en una clínica de Cochabamba, donde debió pagar 22 mil pesos bolivianos (unos 120 mil pesos argentinos) en el primero y casi 7 mil dólares en la segunda por la atención. Además el Gobierno jujeño pagó más de 2 mil dólares a la clínica para que diera el alta a Vilca y pudiera seguir siendo atendido en Jujuy.
Para el traslado del músico jujeño, de cuyo accidente sus familiares se enteraron quince días después, la Provincia envió un avión sanitario al vecino país la semana pasada.
Además de las lesiones en la columna vertebral, Vilca sufrió cinco fracturas en su pie derecho.
Este caso reavivó la iniciativa del Gobierno provincial de tener acuerdos de reciprocidad en materia de salud especialmente con el Estado Plurinacional, ya que ciudadanos argentinos que se enferman en el vecino país deben pagar la atención en establecimientos públicos, cuando en Jujuy ningún extranjero paga nada en hospitales y centros de salud.
Como paso previo a ésto, el Gobierno piensa avanzar en un seguro médico obligatorio para los extranjeros que lleguen a Jujuy, iniciativa que sería tratada mañana en la Legislatura jujeña luego que la misma fuera presentada en mayo del año pasado por el Ejecutivo provincial, con el apoyo de la Cancillería nacional.





IDEAS PARA FRENAR EL POPULISMO DE DERECHA
                                                                                                                                                            
Chantal Mouffe señala que el populismo de izquierda es el único camino para detener el populismo de derecha. La tesis de los politólogos de Harvard Steven Levitsky y Daniel Ziblatt es opuesta: en lugar de agudizar la oposición, moderarla.

Página 12 de Argentina (www.pagina12.com.ar)

Dos libros abordan el ascenso del populismo de derecha como signo del malestar democrático. Aunque enfocados en el primer mundo, iluminan problemas que se verifican también en América Latina y exploran posibles respuestas.
En Por un populismo de izquierda (Siglo XXI), la politóloga belga Chantal Mouffe propone una salida progresista a la crisis hegemónica que atraviesan los países de Europa Occidental. Compañera intelectual y de la vida de Ernesto Laclau, Mouffe sostiene que la aceptación acrítica de la globalización neoliberal por parte de las socialdemocracias europeas inauguró una era de “pospolítica” caracterizada por el vaciamiento de la soberanía popular y la limitación del rol de las instituciones que, como los parlamentos, debían ser los depositarios últimos del mandato social. Mouffe piensa en la Europa de la Troika: no importa a quién –ni qué– se vote, la política económica es la misma porque la autoridad real reside en Bruselas y Frankfurt. 
La consecuencia de este “consenso centrista” es la desafección política verificada en el aumento del abstencionismo y la emergencia de los populismos de derecha que vienen prosperando en casi todos los países de Europa (el Frente Nacional en Francia, el Partido por la Independencia en Gran Bretaña, Vox en España, Alternativa por Alemania, etc), que probablemente arrasen en las euroelecciones de este año. 
Al populismo de derecha solo cabe oponerle uno de izquierda, tal la tesis central del libro de Mouffe. Para ello recurre a la definición clásica de Laclau, que concebía al populismo como una “estrategia discursiva” de construcción de una frontera política que divide a la sociedad en dos campos enfrentados y convoca “a los de abajo” contra “los que tienen el poder”. Desde esta perspectiva, el populismo no configura un tipo de régimen específico ni una ideología determinada (puede ser de derecha, por ejemplo contra los extranjeros, o de izquierda, contra la oligarquía); es simplemente una forma de acumular poder, un modo de construcción política. Mediante la articuación de una “cadena de equivalencias” que eslabona diferentes demandas insatisfechas, el populismo de izquierda es el único camino para desmontar la formación hegemónica neoliberal, ampliar la democracia y frenar al populismo derecha.
Teóricamente irreprochable, el planteo de Mouffe comienza a emitir chirridos conforme se acerca a la realidad. Sucede que todos los ejemplos de populismo de izquierda que ofrece se encuentran lejísimos, lejos o un poco más cerca del gobierno, pero nunca en el poder: Jean-Luc Mélenchon en Francia, Die Linkie en Alemania, el Laborismo de Jeremy Corbyn en Gran Bretaña y Podemos en España. La única propuesta de estas características que llegó al gobierno es Syriza, aunque la autora se encarga de aclarar que una vez allí Alexis Tsipras se vio obligado a aplicar, bajo la mirada acerada de la Troika, un programa económico opuesto al prometido en la campaña. 
En rigor, la región en donde el populismo de izquierda hizo realmente pie es América Latina. Mouffe lo sabe, pero aclara que prefiere limitar su análisis a los países de Europa Occidental porque son los que mejor conoce. Y aquí aparece otro problema. A diferencia de Laclau, que se mostraba entre negador y displicente en relación al tema, Mouffe insiste una y otra vez con que su propuesta no implica un rechazo a la democracia liberal ni la anulación de aquellos factores que la animan (menciona el Estado de derecho, la división de poderes, las libertades individuales y el multipartidismo). 
Sin embargo, si algo demuestra la experiencia latinoamericana reciente es que la democracia liberal y el populismo conviven mal. El caso de Venezuela, donde los aspectos que menciona Mouffe se encuentran amenazados, erosionados o directamente anulados, resulta ilustrativo. Y si en Venezuela la división de poderes ha desaparecido, las libertades individuales están dañadas y las elecciones cuestionadas, en Bolivia Evo Morales optó por ignorar el mandato popular que rechazó en un plebiscito convocado por él mismo la posibilidad de que aspire a un nuevo período de gobierno. Líder de una gestión socialmente inclusiva, económicamente sensata y absolutamente transparente, Evo decidió, sin embargo, seguir un camino opuesto al de Hugo Chávez, que cuando perdió el primer referéndum por su reelección optó por convocar a otro, y prefirió forzar un fallo del Tribunal Constitucional que lo habilite a disputar nuevamente la Presidencia, lo que demuestra que a veces los populismos no sólo ponen en peligro el costado liberal de la democracia sino también el principio de soberanía popular.
Al otro lado del Atlántico, los politólogos de Harvard Steven Levitsky y Daniel Ziblatt ofrecen un diagnóstico diferente para la misma preocupación en su nuevo libro, Cómo mueren las democracias (Ariel). Allí advierten sobre el ascenso de líderes populistas, tanto de derecha como de izquierda, definidos como aquellos que tratan a los opositores como enemigos, intiman a la prensa, amenazan con impugnar los resultados electorales que no los satisfacen, manipulan la justicia y usan a su favor los organismos de inteligencia. La bolsa comparativa es tan grande que, aunque el eje es el horror que les produjo el triunfo de Trump, no dudan en meter allí a Hugo Chávez y Viktor Orbán, a Vladimir Putin y Rodrigo Duterte, a Daniel Ortega y Recep Erdogan.
La tesis central es que en el siglo XXI las democracias no mueren de un único disparo letal sino que se van desangrando lentamente. Lejos del modelo de toma del poder por parte de los militares o los revolucionarios propio del siglo pasado, que permitía establecer un corte nítido, casi diríamos fechar el momento en el que el Chile de Allende o la Argentina de Isabel Perón dejó de ser una democracia, hoy no existe un único momento en el que un régimen cruza esa línea ardiente: la democracia comienza a morir, a menudo sin que nadie se dé cuenta, cuando un demagogo irresponsable es elegido presidente o primer ministro, y luego emprende la tarea de socavar desde adentro los mecanismos que garantizan la democracticidad de la democracia.
Este enfoque, útil para describir los mecanismos silenciosos que le van quitando progresivamente el sentido a un régimen democrático, deja abiertos dos problemas: el primero es que no identifica de manera clara la frontera que separa una democracia de una no-democracia, más allá del nombre con que se designe a este otro tipo de régimen (“autoritarismo”, “autoritarismo competitivo”, “democradura”, “democracia i-liberal” o lo que sea), lo que resulta comprensible desde el punto de vista académico pero bastante inconducente desde el punto de vista de político.
Pero además Levitsky y Ziblatt apenas se refieren al origen de las derivas populistas que tanto los escandalizan: al centrar su análisis en el proceso de deterioro democrático y en las estrategias para evitarlo, pierden de vista las condiciones que lo iniciaron, lo que Mouffe define como el “núcleo democrático” de demandas insatisfechas: no explican por qué los rednecks norteamericanos o los agricultores franceses abandonaron al Partido Demócrata o al Partido Socialista para inclinarse por Trump y Le Pen. Como el macrismo con la inseguridad, miran las consecuencias pero no las causas.
Los dos libros coinciden en que la crisis del 2008 marcó un punto de inflexión, el momento en que las democracias occidentales ingresaron a una nueva etapa, y plantean diferentes respuestas.
Mouffe argumenta que el camino para enfrentar al populismo de derecha no es descalificar a sus partidos y líderes, ni mucho menos a sus votantes; hacerlo implica ignorar la responsabilidad de las fuerzas progresistas, en particular las socialdemócratas, en su crecimiento, y también implica desconocer la fuerza democrática de las demandas sociales que están en el origen de estas nuevas formaciones. Para la autora, excluir a los extremistas, aislarlos sanitariamente de los “buenos demócratas”, por ejemplo a través de alianzas bipartidistas salvadoras de la democracia, puede ser moralmente reconfortante pero no lleva a ningún lado. 
Por eso, como señalamos, propone un populismo de izquierda, un movimiento que reconozca el carácter democrático de los reclamos, los articule y los transforme en una fuerza de orientación progresista, aunque no aclara cómo proceder cuando la demanda consiste en patear a los mexicanos al otro lado de la frontera, prohibirles a los árabes que utilicen los servicios educativos y de salud o endurecer las penas para los delincuentes. Frente a ello, Mouffe simplemente sostiene que “un enfoque populista de izquierda debería proporcionar un vocabulario diferente para orientar esas demandas a objetivos más igualitarios”.
La respuesta de Levitsky y Ziblatt es la opuesta: en lugar de agudizar la oposición, moderarla; en vez de enfrentar al populismo de derecha con uno de izquierda, bloquearlo; más que abrir la democracia, cerrarla. Utopistas del centro, sostienen que la tarea no pasa por impedir el surgimiento de líderes populistas, lo cual es imposible, sino por utilizar todos los mecanismos institucionales y partidistas a disposición para frenarlos. La clase política, y en especial los partidos, es la encargada de detener a los demagogos manteniéndolos alejados de los puestos de poder, rechazándolos como socios y, llegado el caso, uniéndose, más allá de las ideologías, para derrotarlos, como de hecho sucedió en Francia en dos ocasiones: en 2002, cuando los socialistas de Lionel Jospin aceptaron votar “con la nariz tapada” al gaullista Jacques Chirac para evitar el triunfo de Jean-Marie Le Pen, y en 2015, con la victoria de Emmanuel Macron contra Marine Le Pen. Una solución elitista para los problemas de la democracia.
Por supuesto, los autores no aclaran qué sucede si luego de neutralizar a un demagogo aparece otro, y luego otro más, ni tampoco qué hacer cuando el bloqueo sale por la culata, a pesar de que la experiencia reciente es en este aspecto bastante ilustrativa: en la interna demócrata de 2016, la cúpula partidaria cerró filas detrás de la candidatura de Hillary Clinton y, con el apoyo de Wall Street, recurrió a todos los medios a su alcance para evitar un triunfo de Bernie Sanders, considerado demasiado radical. El resultado fue la derrota de la desangelada y ultrasistémica candidatura de Clinton en manos de Trump.
Resumamos. Tras varias décadas de funcionar razonablemente bien, los sistemas políticos del primer mundo crujen, desafiados por el descontento de crecientes sectores sociales, el desamor institucional y la emergencia de líderes de dudosa vocación democrática. Con sus aciertos y sus puntos ciegos, los libros de Mouffe y Levitsky-Ziblatt constituyen los primeros intentos por ofrecer un diagnóstico articulado y una posible respuesta a un problema que, como demostró la reciente elección de Jair Bolsonaro en Brasil, también acecha a América Latina.





EL MITO DE MODA: LAS IZQUIERDAS FRACASAN, LA DERECHA GESTIONA

Notas de Periodismo de Argentina (www.notasperiodismopopular.com.ar)
                                                          
Pareciera que sólo fracasan los gobiernos de izquierda, y siempre por impericias propias. José Saramago decía que el truco era que el capitalismo, en cambio, nunca decepciona porque no promete nada.
Venezuela sirve de excusa por estos días. En distintos medios, “El fracaso” ofició de prefijo para títulos varios: “El fracaso de la economía planificada”, “El fracaso del socialismo”, “del socialismo del siglo XXI”, “de los controles de precios”, y varios más.
Pareciera un retorno a 1991, epílogo de la Unión Soviética: la declamación de que no existe proyecto alternativo al régimen de mercado, el sistema que nunca fracasa, que nunca nada.
La disolución de la URSS se llevó consigo a ese discurso contrahegemónico. Y para buena parte de los gobiernos de Occidente, hoy todo proyecto político que promueva la centralidad del Estado es sospechoso y, a la postre, “populista”.
“Es el término de las élites cuando no entienden lo que pasa”, definió alguna vez Rafael Correa. Y en buena medida es cierto, pero el triunfo de esas élites hoy avanza a paso firme. Inventaron una palabra y una etiqueta que derriba discursos y gobiernos -o al menos eso intenta-.
Son populistas todos aquellos que procuran “eliminar el sistema de capital libre y abierto”, declaró hace unos años la Cámara de Comercio de Estados Unidos. Como afirma el historiador Ezequiel Adamovsky, pareciere un intento por cerrar filas contra el populismo y a favor de la democracia liberal; el statu quo del capital.
Así, contra el populismo de Nicolás Maduro, claman también las voces para frenar al populismo boliviano de Evo Morales, al populismo español de Podemos, al populismo francés de Jean-Luc Mélenchon.
***
En Argentina, el populismo, con sus diversos epítetos, es el fantasma que se azuza con más frecuencia para asegurar la continuidad de Cambiemos. La batalla que se viene en octubre, exclama el periodista Alfredo Leuco, es “entre chavismo mafioso y democracia republicana”. La afirmación es absurda, pero su eficacia en términos de comunicación es notable: hay gente que en verdad lo cree.
Con mayores aires de rigor, profusos politólogos dicen que en realidad el populismo se caracteriza por el cortoplacismo, por procurar el crecimiento rápido y la redistribución a expensas de la sustentabilidad a la larga. La receta alternativa sería la de Pedro Eugenio Aramburu en 1957: ofrecer “minutos de privaciones para lograr años de abundancia”. Una épica de la tormenta, en su versión moderna.
El populismo ofrecería así la posibilidad de retomar la senda del crecimiento distributivo, un pecado imperdonable para la ortodoxia, ante cuyos reparos Keynes hizo célebre su frase “En el largo plazo estamos todos muertos”, pensando en la salida de la crisis de los años treinta.
En cualquier caso, la crítica de los ortodoxos locales ventila mayormente los defectos propios: esa incapacidad de ofrecer soluciones a la sociedad sin condenarla antes a deambular cuarenta años por el desierto. El futuro será auspicioso, pero en el presente sube el desempleo, la pobreza y cae el consumo.
En ese sentido, la descalificación que el gobierno y los medios afines hacen a todo plan económico alternativo invalida el debate político. Porque si la alternativa al populismo es la democracia-liberal-republicana, lo que se procura instalar es el miedo como motivador de un voto conservador: un voto al candidato “populista” serviría para remontar la crisis económica, pero en el largo plazo pondría en riesgo la sustentabilidad y la democracia. Un silogismo para abrazarse al salvavidas de plomo con entusiasmo.
Un presidente debe ser. El decálogo de indicaciones heterónomas rige siempre en estos casos: cualquier desviación despierta acusaciones. Y con esa vara, hoy también serían populistas Hipólito Yrigoyen por su personalismo, Arturo Illia por la intervención estatal en el negocio farmaceútico, o Raúl Alfonsín por la distribución de cajas de comida.
Pero no funciona así en estos casos. El populismo con retrospectiva histórica es un lugar reservado sólo al peronismo, padre de todos los males.
***
Los liberales-republicanos autoproclamados imponen sus relatos. Aquello llamado populismo es culpable de la crisis económica venezolana, pero no del éxito boliviano. El carácter reeleccionista es característico del populismo boliviano, pero no de la democracia alemana. Argentina y Venezuela demuestran que el populismo violenta las instituciones democráticas, pero los golpes institucionales en Brasil y Paraguay en cambio no demuestran nada.
Hace veinte años, Latinoamérica, con sus grises, fue la vanguardia de una forma alternativa de hacer política económica. Hace diez, se convirtió en el foco de la crítica de los poderosos locales y foráneos: el populismo de izquierda era un peligro para el mundo y su demagogia, una deformación de la verdadera democracia, la liberal-republicana-ortodoxa-impoluta.
Desde hace veinte años, América Latina es la región que más avanzó en la reducción mundial del hambre y la desnutrición infantil. Pero se ha instalado que el fracaso habita por estos lares y no en los países de economía liberal, cuya crisis especulativa de 2008 disparó el precio global de los alimentos como nunca antes en la historia moderna.
Fracasar, en la acepción más absoluta del término, es una opción que anida sólo en los gobiernos de izquierda y afines. Populistas, izquierdistas, demagagos, variaciones de un mismo discurso ilusorio, de una ficción terrible: el capitalismo del norte occidental es el único sistema viable.





LAVROV VE "ALARMANTE" LA SITUACIÓN EN VENEZUELA Y ACONSEJA UN "DIÁLOGO NACIONAL"

El Día de España (www.eldia.es/internacional)

El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha asegurado este martes que ve "alarmante" la situación en Venezuela y ha abogado por el establecimiento de un proceso de diálogo nacional para resolver las diferencias entre el Gobierno y la oposición, ha informado la agencia de noticias rusa Sputnik.
En su intervención en un centro universitario de Dusambé (Tayikistán), el jefe de la diplomacia rusa ha dicho que es "escandaloso" que varios países extranjeros hayan reconocido como presidente interino de Venezuela a Juan Guaidó.
"También es alarmante el rechazo a las iniciativas que buscan establecer un diálogo nacional, la única vía para resolver los problemas actuales, según nuestra convicción. Estas iniciativas son descartadas, suplantadas por otras, para implementar un cambio del régimen", ha subrayado.
Lavrov ha hecho hincapié en que la solución a la coyuntura actual debe llegar a través del diálogo. "Sostenemos que la única manera de superar esta crisis es lograr que el Gobierno y la oposición se sienten a la mesa de negociaciones. De lo contrario, no pasaría de ser otro cambio de régimen, de esos que Occidente promueve en múltiples ocasiones", ha indicado.
Por último, el jefe de la diplomacia rusa ha recalcado que "no existe un solo país que haya logrado mejoras con un cambio de régimen".
Rusia acusa a la UE de injerencia en Venezuela
El Kremlin acusó ayer a países de la Unión Europea (UE) que reconocieron como presidente encargado de Venezuela al presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, de injerencia “directa e indirecta” en asuntos internos de ese país. “Los intentos de imponer una solución o legitimar el intento de usurpar el poder son, en nuestra opinión, una interferencia directa e indirecta en los asuntos de Venezuela”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Peskov insistió en que los únicos actores capaces de resolver la crisis política interna en el país latinoamericano son los propios venezolanos, mientras que el paso dado por los países de la UE “no favorece de ninguna forma un arreglo pacífico, eficaz y viable de la crisis” que atraviesa Venezuela.
El ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, también criticó el ultimátum de la UE a Maduro y afirmó que Moscú apoya las iniciativas que presentan algunos países latinoamericanos, como México y Uruguay, y que prevén el diálogo nacional “con participación de todas las fuerzas políticas de Venezuela”.





MADURO DICE QUE ACTIVÓ TODO EL PODER ARMAMENTISTICO DE VENEZUELA PARA REPELER CUALQUIER AGRESIÓN DE EE.UU

Radio Santa Fe de Colombia (www.radiosantafe.com)

El presidente de Venezuela Nicolás Maduro, anunció la activación de todo el poder armementistico de Venezuela, incluidos los misiles, para defender al país de una eventual incursión militar de los Estados Unidos.
No obstante advirtió que “en Venezuela no va haber intervencionismo, ni va haber golpe de Estado consolidado, no va haber guerra en Venezuela; va a ganar la paz, vamos a volver a triunfar por un solo camino, la paz con justicia”.
Maduro indicó que Venezuela posee una Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb), con un alto nivel de conciencia y moral para defender el territorio ante cualquier escenario.
“Estamos preparándonos para defender la paz, el territorio, preparándonos muy enserio, porque Venezuela tiene una Fuerza Armada Nacional Bolivariana profesional, de gran nivel operativo, técnico y moral doctrinario”, expresó durante un encuentro con intelectuales y movimientos en apoyo con el pueblo venezolano, en la Casa Amarilla, Caracas.
Maduro destacó que Venezuela y los cuerpos castrenses cuentan con 8 regiones de defensa integral, siendo cada una de estas autónomas para actuar en momentos de conflictos.
“Hemos jurado a esta; nuestra Venezuela, no la toca nadie. Hemos jurado defenderla y dar nuestra vida por ello”, dijo.
“Es una locura hablar de guerra en este siglo XXI. Una locura señor Donald Trump pensar siquiera que va enviar su ejército a esta tierra que tiene quien la defienda”, expresó.
Señaló que las intenciones del gobierno estadounidense son la de tomar las riquezas naturales del país. Dijo que Trump no tiene razones para tomar una acción militar contra Venezuela.
Denunció que las amenazas del mandatario norteamericano violan lo establecido en la Carta de las Naciones Unidas y del Derecho Internacional, al respecto de las relaciones entre Estados.
“Lo digo como pueblo de paz, señor Donald Trump no le tenemos ningún miedo a sus amenazas. Venezuela tiene el derecho y la verdad de su lado, estamos del lado correcto de la historia y usted no tiene razones para amenazar a un país libre, pacífico como el nuestro de una amenaza militar”, añadió.
Lamentó que algunos sectores de la oposición venezolana avalen una intervención estadounidense.
También rechazó las declaraciones de guerra de otros funcionarios de alto rango de EEUU. Denunció que el consejero de Seguridad, John Bolton; el vicepresidente, Mike Pence, y el secretario del Departamento de Estado, Mike Pompeo, sostienen una campaña a través de las redes digitales para llamar a tomar acciones violentas contra el Estado venezolano, además de usar este medio para instruir a los voceros de oposición.
“Por Twitter dan orden de cuándo marchar, dónde marchar, qué hacer, qué anunciar, qué decir. Por Twitter John Bolton llama a un alzamiento militar para derrocar al gobierno de Maduro”, condenó.
“John Bolto es un loco extremista involucrado en todas las operaciones sucias de los últimos 40 años del imperio estadounidense en el mundo”, advirtió.
El presidente Maduro lideró desde la Casa Amarilla, Caracas, sede de la Cancillería de la República, un encuentro de más de 160 intelectuales, movimientos y líderes del mundo que debatieron ideas en relación de fortalecer la diplomacia de paz y apoyo con el pueblo venezolano.





MADURO ASEGURA QUE A VENEZUELA NO ENTRARÁ "NI UN SOLDADO INVASOR"

RCN de Colombia (www.rcnradio.com)

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró este lunes que al país no entrarán soldados invasores y rechazó la "campaña de guerra psicológica" según la cual, dijo, es inminente una intervención extranjera.
"Aquí en Venezuela no va a entrar nadie, nadie, se los aseguro, ni un soldado invasor, venga de donde venga, así se los aseguro como comandante en jefe de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) que soy", dijo el mandatario, que no es reconocido como tal por numerosos países de América y Europa.
El líder chavista acusó directamente a Estados Unidos de estar detrás de un plan de intervención extranjera en el país en alianza con el Parlamento venezolano, de mayoría opositora, que tampoco le reconoce como presidente legítimo por haber obtenido su reelección en unos comicios tachados de fraudulentos.
"Es una locura, señor (presidente de EE.UU.) Donald Trump pensar siquiera que usted va a mandar su ejército a esta tierra que tiene quien la defienda", prosiguió.
Denunció que existe una "guerra psicológica anormal" en medio de la cual se han difundido rumores en los últimos días en las redes sociales sobre presuntas invasiones al territorio venezolano por parte de ejércitos extranjeros.
"En Venezuela no va a haber intervención, golpe de Estado consolidado, ni guerra", remarcó.
Maduro aseguró también que su Administración le está "ganando la partida" a los gobiernos que reconocen al jefe del Parlamento, Juan Guaidó, como presidente encargado de Venezuela y a los países americanos que conforman el Grupo de Lima y son críticos del chavismo.
La reunión de emergencia de ese Grupo terminó este lunes en Ottawa con el compromiso de sus integrantes de no considerar la opción militar para forzar la salida de Maduro y con una petición a otros países para que aumenten la presión económica sobre su Gobierno.
Sin embargo, Maduro acusa a esta alianza de naciones de estar detrás de planes intervencionistas por lo que, aseguró, los militares venezolanos han estudiado todos los escenarios para defender a la llamada revolución bolivariana.





LOS OBISPOS DE VENEZUELA PIDEN QUE SE PERMITA EL INGRESO DE AYUDA HUMANITARIA

Informaría de Venezuela (www.informaria.com)
                                                                       
La Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) ha pedido este lunes a las autoridades permitir el ingreso de la ayuda humanitaria que se espera llegue en los próximos días a las fronteras, pero hasta ahora el presidente Nicolás Maduro insiste en que se trata de un “show malo y barato”.
En un comunicado, los obispos solicitan que “sean concedidos los permisos necesarios para disponer de la ayuda humanitaria como un medio para mitigar el impacto de la crisis sobre la gente más vulnerable”.
“El pueblo Venezolano ha despertado, está en la calle porque anhela un cambio en el rumbo político y democrático del país”: es la afirmación que fue plasmada en el comunicado conjunto de la Presidencia de la Conferencia Episcopal Venezolana, la Conferencia Venezolana de Religiosos y Religiosas y el Consejo Nacional de Laicos este lunes 4 de febrero.
Moralmente inaceptable la represión, proteger al pueblo
En el comunicado los tres organismos eclesiales exigen a los organismos de seguridad del Estado que “no sigan reprimiendo a sus hermanos venezolanos y asuman su verdadera responsabilidad de proteger al pueblo en toda circunstancia, particularmente cuando ejerzan el derecho a la protesta pacífica”.
“Es moralmente inaceptable la creciente represión por motivos políticos, la violación de los Derechos Humanos y las detenciones arbitrarias y selectivas”, aseveran.
Señalan además que las marchas del 23 de enero y la del 2 de febrero han dado “testimonio de la fuerza y la perseverancia de un pueblo que cuando es exigido responde positivamente ante el anhelo de un mejor futuro, donde la vida no esté en riesgo permanente, sino que hayan oportunidades para el desarrollo humano integral y la reactivación de los valores de la paz, la reconciliación y el encuentro”.
Que se acaben los abusos de poder
Por otra parte se pone de manifiesto la urgencia de que el Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo “cumplan con su primer deber que es el estar al servicio del pueblo y, de una vez por todas, se acaben los abusos de poder y las detenciones antes descritas, en particular, lo que se refiere a las detenciones de menores de edad”.
“No caigan en contradicción las mismas leyes que profesan respetar, y siéntanse independientes de cualquier otro poder público a la hora de ejercer sus funciones”, exhortan, a la vez que realizan un reconocimiento y agradecimiento “a los activistas que defienden y promueven los Derechos Humanos en momentos de crisis y tensión en el país, por el servicio que desempeñan a pesar de los riesgos”, y les animan a seguir atendiendo a las víctimas que sufren injusticias. “Pedimos el respeto y la seguridad personal y jurídica para quienes ejercen este digno servicio en Venezuela”, escriben.
Los miembros de las presidencias de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), de la Conferencia de Religiosos y Religiosas de Venezuela (CONVER) y del Consejo Nacional de laicos de Venezuela (CNL), testimonian experimentar en todas las comunidades a las que sirven y en todo el contexto nacional, “una dolorosa situación de injusticia y sufrimiento por la carencia de lo necesario para una vida digna y productiva, y la indefensión ante la justicia”.
Transición hacia proceso electoral sea pacífico, evitar derramamiento de sangre
Se trata de una situación “dramática”, que ha generado “con determinación y esperanza”, la “búsqueda de un cambio político a través de un proceso de transición pacífica y transparente, que lleve a elecciones libres y legítimas para retomar el rumbo democrático y lograr la recuperación del Estado de Derecho, la reconstrucción del tejido social, la producción económica, la moral en el país y el reencuentro de todos los venezolanos”. Motivo por el cual se señala la necesidad de asumir la ruta de transición hacia un proceso electoral “de forma pacífica y con los instrumentos presentes en la Constitución Nacional, para evitar mayores sufrimientos y dolores al pueblo”. Y se invita a todo el pueblo venezolano “a dar lo mejor de sí, cada uno en su ámbito de trabajo y acción, para que desde la unidad, la solidaridad y la responsabilidad ética, con un espíritu distendido”, se busque “el bien común” y se trabaje “sin descanso en la reconstrucción de la Democracia y de la patria entera, evitando el derramamiento de sangre como bien lo ha expresado el Papa Francisco”.
Sean concedidos permisos para ayuda humanitaria
Recordando el compromiso de la Iglesia católica en el acompañamiento y auxilio a la población más afectada, que ha actuado siempre según los principios “de independencia, imparcialidad y humanidad”, los organismos eclesiales solicitan que “sean concedidos los permisos necesarios  para disponer  de  la ayuda humanitaria como un medio para mitigar el impacto de la crisis sobre la gente más vulnerable”.
Y aseguran el compromiso de Cáritas de Venezuela y las diversas instituciones de promoción social de la Iglesia a continuar con ese servicio que están realizando “con equidad, inclusión, transparencia y efectividad”,





CINEMARK BOLIVIA MEJORA LA EXPERIENCIA DE COMPRA ANTE AUGE DEL E-COMMERCE

Perú Retail (www.peru-retail.com)
                                                               
Es posible comprar las entradas a Cinemark a través de su app y mediante Tigo Money.
Hace poco, la cadena de salas de Cinemark celebró cinco años desde que aterrizó a Bolivia. Con ello, frente al creciente desarrollo del e-commerce y la omnicanalidad, la firma lanzó su aplicación móvil, para que así los usuarios puedan comprar sus entradas vía online sin necesidad de acercarse a ventanilla. Así mismo, han ido sumando nuevas tecnologías para mejorar la experiencia de sus clientes.
“Iniciamos nuestras operaciones en Santa Cruz, con tecnología de última generación para que los aficionados al cine, vivan una experiencia de calidad superior y máximo confort”, señaló a la web Economy Alejandro Borda, gerente de operaciones de Cinemark Bolivia.
“Con las nuevas tecnologías, además de la compra de entradas en ventanillas tradicionales, hemos incorporado otras cuatro alternativas”, añadió.
Una de las 4 innovaciones que ha implementado Cinemark Bolivia es el quiosco de autoservicio, el cual permite al cliente cliente elegir su película favorita, una butaca y realizar el pago con tarjetas de débito y crédito. Todo ello con el objetivo de brindar mayor autonomía y para evitar hacer largas filas.
Actualmente, Cinemark es la única compañía en Bolivia que cuenta con Salas VIP, que incluye el especial servicio de catering. Además, cuenta con dos salas con butacas con tecnología D-Box, que son butacas que sincronizan la acción en la pantalla para moverse, ofreciendo una sensación más realista.
A parte del app móvil de la firma de salas de cine, también es posible comprar entradas mediante Tigo Money. Cabe mencionar que, la empresa tiene un ciclo de películas clásicas y se organizan los estrenos de producciones animadas del género animé, entre otras cosas.
Finalmente, el gerente de operaciones de Cinemark Bolivia precisó que cada mes reciben cerca de 100.000 personas, pero en días festivos han logrado alcanzar hasta 14.000 espectadores en un solo día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario