La representante del MAS logró el consenso para
la ley que habilita nuevas elecciones y el próximo jueves, está segura, se
sancionará el reglamento para que sea efectiva. "Esto ya estaba organizado
y sólo les quedaba dar la estocada final y encontraron el momento",
afirma.
Mónica Eva
Copa, con sus pantalones cargo y su campera azul cerrada hasta el cuello, sin
dudas desentona con los dorados que recargan la sala de audiencias de la
presidencia del Senado boliviano. Está incómoda con el lugar que le tocó, pero
lo ocupa y se hace cargo. Como presidenta de la Asamblea Legislativa por
decisión de la bancada del MAS, a la que pertenece orgullosa, logró el consenso
para la ley que habilita nuevas elecciones y el próximo jueves, está segura, se
sancionará el reglamento para que sea efectiva. La promulgación de esa ley le
valió a esta alteña de 32, trabajadora social y aymara una foto con Jeanine
Áñez, la autoproclamada presidenta. “Es mi rol y tuve que hacerlo. No tengo
trato con ella salvo porque es mi vecina, ella sale del Palacio Quemado con un
tanque adelante y otro atrás y yo salgo de la legislatura en mi carro”, dice
intentando bromear con una contradicción que resuelve porque, dice, es un hecho
consumado la ocupación de la casa de gobierno.
--¿Se puede
decir que hay un acuerdo en torno a nuevas elecciones en el corto plazo?
--Sí, el
jueves se reunirá el pleno de la asamblea legislativa y se sancionará el
acuerdo de que en los próximos 20 días se elijan los seis vocales del Tribunal
Supremo Electoral -que no deben tener ninguna militancia partidaria en los
últimos diez años-, y en las siguientes 48 horas el TSE deberá presentar el
calendario electoral pero con un plazo máximo de 120 días.
--La ley de
elecciones venía atada a la Ley de Garantías que busca reparación para víctimas
fatales y heridas y el cese de la persecución política de la que están siendo
objeto funcionarios y funcionarias, militantes y hasta simpatizantes del MAS.
¿También hay acuerdo sobre esa ley?
--Bueno, ya
ayer la Mesa de Unidad firmó un acuerdo con el gobierno de transición junto con
la COB -Central Obrera Boliviana- y otras organizaciones. Esto hace que podamos
reencaminar el trabajo que veníamos realizando en ese sentido pero se está
priorizando que vaya en paralelo el reglamento sobre las elecciones. Nosotros
sesionamos como Asamblea Legislativa el día jueves y bueno ahí se tratará punto
por punto ese reglamento.
--Antes de
volver a preguntarle sobre la ley de garantías, quisiera subrayar su expresión
¿incómoda? ¿irónica? Cuando dijo “gobierno de transición”.
--Bueno,
ellos ya están ahí asentados con las dos fuerzas represoras de mi país a su
lado; entonces no se puede hacer nada ¿no? Ellos saben como han llegado a
autoproclamarse como gobierno y el pueblo los juzgará.
--Volvamos a
la ley de garantías, ¿se podrá tratar el jueves?
--Pienso que
para el viernes ya la podríamos tener, ojalá, pero también es difícil sentarse
con organizaciones sociales para ver qué quieren, tenemos a favor que se
llegaron a acuerdos en la mesa de unidad y esos acuerdos los vamos a ratificar.
--¿Esos
acuerdos incluyen el cese de la persecución contra funcionarios públicos y
autoridades electas?
--Lo que
estamos diciendo en esta ley es ratificar los derechos humanos y
constitucionales que tienen los mandatarios y mandatarias y así se va a
reflejar, como lo dice la Constitución.
--Hay
evidencias y denuncias de persecución contra dirigentes o incluso militantes
del MAS, hay un pedido de detención sobre el presidente Evo Morales, sobre el
ministro de Gobierno Juan Ramón Quintana, hay personas buscadas por sedición y
terrorismo; ¿esto cómo lo contempla la ley de garantías?
--La ley en
su artículo siete manifiesta que se debe garantizar la protección a todos los
que hayan sido elegidos por voto dentro de su mandato constitucional. De igual
manera los ministros o ex ministros que al día de hoy están con diferentes
situaciones, ellos tienen por ley el tema de la amnistía. Lo único que hay que
hacer es cumplir la Constitución y ellos requerirán asilo en las diferentes
embajadas.
--¿Y quienes
ya están detenidos como el gobernador de Chuquisaca?
--Tiene
detención domiciliaria, entiendo. La ley va a garantizar el ejercicio pleno de
todos los que hemos sido elegidos en votaciones. Esta ley dice no a los
amedrentamientos, a la persecución política, no más hostigamiento ni amenazas
para que renuncien por presión. Es lo que venimos pidiendo y es lo que vamos a
pedir. Ha habido consensos y lo que queda ahora es sentarnos y afinar la ley
para que esto pueda ser una realidad.
--Esa ley
también hace mención a las víctimas fatales y heridas durante la represión
desatada después de la autoproclamación de Jeanine Áñez en la presidencia.
--Es el
primer punto que salga la indemnización para las familias de los fallecidos,
que también el gobierno busque recursos, bueno este gobierno de transición (la
cara se le deforma otra vez), para que cubra los gastos de las personas heridas
en todo el país. Y también que se formen mesas de trabajo para liberar a los
detenidos. Hasta ayer... ¿hoy en que día estamos? (le soplan que es lunes),
bueno, hasta el jueves pasado teníamos mil detenidos injustamente. En la mesa
de unidad que se reunió estos días en el Palacio Quemado se acordó que se haría
una mesa con fiscales generales y organizaciones para ver caso por caso y que
sean liberados.
--Y en
cuanto a las responsabilidades penales que le puedan caber a quienes ejecutaron
la represión y quienes dieron las órdenes, ¿se va avanzar en ese sentido?
Porque hasta ahora el decreto que da inmunidad a las fuerzas armadas y de
seguridad sigue vigente.
--Una carta
blanca para matar (hace un largo silencio). Si bien no va a haber Justicia en
nuestro país por ese hecho, hay instancias internacionales en las que sí va a
haber. Pienso que el gobierno de transición ha debido ver los mecanismos para
sacar ese decreto que es inconstitucional y debe saber que hay tantos
organismos internacionales como prensa internacional que ha visto lo que ha
pasado muy de cerca. Hay tribunales internacionales que van a tener que juzgar
lo que pasó en nuestro país.
--O sea que
no ves instancias ni confianza en la Justicia de Bolivia.
--Después de
todo lo que ha pasado no puedo confiar.
--¿En quién
o en quiénes sí confía? Porque ocupa un lugar de mucha responsabilidad en este
momento.
--Yo no soy
cristiana pero creo en dios, no puedo confiar más que en él y le pido que me de
sabiduría para tomar decisiones. Eso no quiere decir que no tome en cuenta la
voz de mis organizaciones; pero creo que en este momento en particular es
necesario tomar decisiones con la cabeza y no con el corazón.
--¿A qué se
refiere?
--A que si
tomara decisiones con el corazón seguiríamos en guerra. Pero hay que usar la
cabeza para que esto se pacifique y no haya más muertes.
--No termino
de entender qué es lo que guiaría el corazón.
--Me refiero
a que están siendo vulnerados nuestros derechos, a que ya no hay libertad de
expresión, al título de sedición. A los muertos. Si muere alguien dejas
familias, dejas más heridas; pero no se puede multiplicar esa situación
trágica. Estas decisiones las tomo con mi bancada, somos los dos tercios, el MAS,
ahora oposición, y hemos tomado decisiones conjuntas, unánimes y hasta ahora
hemos encaminado este proceso de buena manera y seguiremos así.
--¿Cómo
imagina la salida política? Porque hasta ahora hay pasos técnicos en relación a
definir elecciones, pero ¿cómo se llega a las elecciones, con qué candidaturas?
Más teniendo en cuenta que Luis Camacho y Marco Pumari -cívicos que acompañaron
la autoproclamación de Áñez con la Biblia en la mano- ya se postularon como
candidatos de unidad de la derecha.
--Yo pienso
que el pueblo es sabio, pienso que nuestra gente no es tonta y lo va a
demostrar en estas elecciones. Haber utilizado a la biblia y a dios como
bandera de una reivindicación de recuperar la democracia y ahora los ves con
perfiles de candidatos... será la población quién los vaya a juzgar. Yo como
senadora del MAS no tengo la tuición ni la potestad de elegir los candidatos,
serán los representantes regionales, departamentales, nacionales los que
convoquen a congresos y definan quiénes serán los mejores hombres y mujeres
para las candidaturas, aglutinando a los sectores que están dentro del MAS:
organizaciones sociales, clase trabajadora media y obrera. Así se tomarán las
decisiones.
--¿Cómo cree
que un movimiento como el 21F, que cuestionaba que no se haya respetado el
plebiscito que dijo no a otra reelección y que no era estrictamente de derecha
se haya convertido en una fuerza capaz de forzar un golpe de Estado que tiene
características racistas, xenófobas, fascistas?
--Bueno
porque muchos políticos pueden tener disfraces. Creo que esto no ha sido
trabajado por nosotros en los meses previos. Hemos sido muy autocríticos en
relación a que no estábamos preparados para enfrentar una organización bien
orquestada desde hace mucho tiempo, eso no lo vimos. Esto ya estaba organizado
y sólo les quedaba dar la estocada final y encontraron el momento. Pero yo
insisto que la historia y nuestro pueblo boliviano son los que van a juzgar el
actuar de quienes ahora estamos en la palestra política. Y en cuanto al racismo,
creímos que lo habíamos superado, que ya no había esa lucha; lamentablemente no
es así.
--¿Tiene
diálogo con la presidenta de facto?
--¡Nooo! Si
tuve que salir en la foto es porque la ley de elecciones es un trabajo del MAS.
Nosotros encaminamos la ley, con nuestros dos tercios hemos tenido la voluntad
política y la responsabilidad de sacar esta ley. Una cosa es que lo promulgues
y otra muy distinta que lo trabajes. Nosotros la trabajamos con los partidos
aliados y llevamos la ley en unanimidad.
--¿Le preocupa
que quienes están en el ejecutivo puedan realizar modificaciones estructurales
en la economía por ejemplo?
--Ellos
pueden sacar decretos supremos y también pueden cerrarnos el Congreso si no les
gusta lo que hacemos, pero si deciden por esa opción será el pueblo boliviano
juzgará y actuará.
--¿Cuál es
la responsabilidad de la bancada legislativa en la reorganización del MAS?
--Lo que se
juega acá es mantener vigente al MAS en el ámbito político. Y serán delegados y
delegadas regionales, las organizaciones sociales, de mujeres, campesinas,
todos los sectores que integran el movimiento quienes reorganicen el partido. Página 12 de Argentina
(www.pagina12.com.ar)
QUIÉNES SON LAS DOS MUJERES QUE MANEJAN LA
TRANSICIÓN EN UNA BOLIVIA MÁS PACIFICADA
La Nación de Argentina (www.lanacion.com.ar)
En los
últimos 15 días, dos mujeres tomaron el protagonismo de la caótica escena
política en Bolivia: Jeanine Áñez
y Eva Copa. Sus nombres, que hace poco eran desconocidos, ahora resuenan en los
medios de comunicación de todo el mundo. Es que de ellas depende la titánica
tarea de convocar a unas elecciones que pacifiquen el país en un proceso
que no incluya al expresidente Evo Morales, ahora asilado en México,
y quien dominó la política boliviana desde el 2006.
Áñez, de la
alianza conservadora Unidad Demócrata (UD) y Copa, del Movimiento al Socialismo
(MAS), dieron el primer paso el domingo hacia una resolución pacífica del
conflicto al exhibir en el antiguo Palacio de Gobierno la ley que anulaba las
elecciones del pasado 20 de octubre tras las denuncias de
fraude y convocaba a las urnas en un plazo de 120 días, en una fecha
aún sin fijar, pero que podría situarse entre fines de marzo y principios de
abril.
"Estamos
volviendo a la normalidad después de algo tan duro y tan dramático, pero creo
que estamos avanzando", dijo a periodistas el domingo Áñez, quien desde
que el 12 de noviembre asumió la presidencia interina alegando la existencia de
un vacío de poder por cinco renuncias consecutivas previas.
Pareciera
que la rispidez entre la presidenta interina de Bolivia y Copa, presidenta del
Senado, ha menguado un poco desde el tumultuoso ascenso de Áñez, a quien la
oposición ha acusado de golpista por su vínculo con los militares.
Para continuar
con la transición, el Congreso se reunirá probablemente hoy para aprobar el
reglamento de esta nueva ley de convocatoria de elecciones y comenzar el
proceso de selección de seis vocales al frente del Tribunal Supremo Electoral
(TSE). El séptimo es designado por la presidenta transitoria por una
prerrogativa constitucional.
"Estamos
viendo convocar mañana, martes, a la Asamblea Legislativa y aprobar este
reglamento para que los bolivianos y bolivianas interesados en poder ser
vocales electorales puedan ser partícipes" del proceso de selección,
declaró ayer Copa.
Por su
parte, Áñez dio ayer el primer paso al elegir al politólogo Salvador Romero
Ballivián como su delegado ante el TSE. Romero ya integró ese órgano entre 2004
y 2008 como delegado del expresidente Carlos Mesa.
De Evo a Eva
Eva Copa, de
32 años, nació en 1987 en El Alto, departamento de La Paz, de donde era
senadora desde 2015. Licenciada en Trabajo Social por la Universidad Pública de
El Alto, estaba planeando un año sabático antes de que estallara la crisis en
Bolivia. Sin embargo, unos días después se convirtió en presidenta de la Cámara
de Senadores.
Su
nombramiento fue consecuencia del vacío de poder que dejó la renuncia de
Evo Morales y sus más fieles aliados, como el exvicepresidente
Álvaro García Linera y la senadora Adriana Salvatierra.
Copa fue
"activista política por la defensa de los derechos de la juventud y de la
mujer alteña" y activista de plataformas de socialización y
concientización de los derechos y garantías de las mujeres.
De hecho,
cuando asumió la presidencia del Senado el 14 de noviembre lo hizo reconociendo
el valor de las mujeres del país: dijo que las mujeres habían sido parte del
proceso de cambio en Bolivia y que podían seguir luchando ante la crisis.
"La
mujer no tiene miedo de sacar adelante este país y lo vamos a hacer todas.
Oficialismo y oposición, de pollera, de pantalón, indígena, originaria, clase
media, clase alta, todas vamos a trabajar por el país", dijo entonces.
Copa, tras
un dialogo entre el Gobierno y las organizaciones sociales que estaban
movilizadas, también se comprometió a que se aprobaría en el Legislativo el
proyecto de "Ley para a Pacificación del País y para Reafirmar el
Ejercicio de los Derechos y Garantías del Pueblo Boliviano".
ENTREVISTA AL “SEÑOR LITIO” DE LA UNLP: “PARA
LOS NEOLIBERALES BOLIVIA ERA UN MUY MAL EJEMPLO”
Info BLANCO SOBRE NEGRO habló con uno de los
máximos referentes científicos en materia de desarrollo tecnológico del litio.
El investigador de la CIC que trabaja en el Centro Tecnológico Aeroespacial
(CTA) de la Facultad de Ingeniería de la UNLP, aseguró "no tener
dudas" de que el avance del proyecto de industrialización boliviano en
torno a este mineral fue uno de los máximos factores en la destitución del
presidente Evo Morales. La entrevista a Guillermo Garaventta.
Blanco y Negro de Argentina
(www.infoblancosobrenegro.com)
- ¿Qué
importancia pensás que tuvo el litio en el Golpe de Estado en Bolivia?
Bolivia es
el país que posee la mayor cantidad de recursos litíferos del mundo y en
salares. Además posee reservas de gas, petróleo, plata y oro. Tampoco hay que
olvidar que está la cordillera esperando a ser explorada.
El mundo
habla de autos eléctricos pero la salmuera de mayor pureza, de fácil extracción
y por ende más barata, se encuentra en Bolivia. Pensando en el 2030 como
proyección de la construcción de autos eléctricos en un número mayor a los 100
millones, no hay otra opción que sacar el litio de estos lugares.
Bolivia
comenzó con la industrialización del carbonato de litio grado batería para
luego continuar con la construcción de autos eléctricos. Todo esto, para un
mundo inmerso en el neoliberalismo, es mala palabra. Que un presidente
originario, y distribuyendo en favor de su gente, logre concretar tales
desafíos tecnológicos es un muy mal ejemplo desde la mirada de los neoliberales
meritocráticos.
Por eso no
me cabe duda de que el Golpe de Estado tiene que ver con desestabilizaciones
extranjeras en Bolivia, en torno al recurso litio y su desarrollo tecnológico,
y que aprovecharon las supuestas ilegalidades de la reelección.
- ¿Cómo
venía desarrollando Bolivia su proyecto de industrialización del litio? ¿Crees
que se puede truncar?
Bolivia
logró a través de empresas del Estado extraer la salmuera, purificarla y
convertirla en carbonato de litio grado batería, todo hecho por su propia gente
capacitada en el extranjero. Logró desarrollar un auto eléctrico para tres
personas con un 40% de componentes propios y con un valor final de venta del
orden de los 5.500 dólares. Esto fue visto con preocupación por el mercado
actual de autos eléctricos en el que ese precio es ampliamente superado. Las
economías del ‘primer mundo’ muestran siempre un marcado interés en aprovechar
para su propio beneficio los recursos naturales de los países periféricos y
frenar sus desarrollos e industrias de alta tecnología.
Sin un
gobierno que regule la extracción del mineral y potencie el valor agregado que
este recurso puede generar, invirtiendo en el proceso desde el desarrollo de
baterías hasta la construcción del vehículo, lamentablemente Bolivia verá
truncado su desarrollo tecnológico sobre este tema.
- ¿Cómo
explota Argentina el litio en comparación con Bolivia? ¿El boliviano es un
proceso a imitar?
Argentina
explota la salmuera pero a través de empresas extranjeras convirtiéndola en
carbonato de litio grado batería. Nosotros ponemos el recurso y la poca gente
que esto requiere y la empresa pone la tecnología llevándose el producto al
exterior. Argentina provee entonces al mundo el insumo básico (carbonato de
litio grado batería) para la construcción de pilas en el exterior que es lo que
produce el mayor valor agregado de la cadena de valor del litio.
El modelo
Boliviano es un modelo para imitar ya que no se desprende del recurso primario
sin antes darle el mayor valor agregado que es convertirlo en pilas. Además,
produce uno de los dispositivos que más consumo de pilas genera:los autos
eléctricos. Esto implica otra fortaleza, que es la de competir en el mundo de
los autos con energías limpias y demostrar que sus pilas son tan seguras como
las más reconocidas del mercado.
- ¿Qué es lo
más difícil de lograr en una industrialización del litio con soberanía? ¿Es un
proceso a muy largo plazo?
Soberanía
implica generar desde el Estado una política de desarrollo tecnológico, en este
caso del litio, pero sin injerencias de estados extranjeros. Ahora bien, esta
definición de manual no alcanza. La soberanía resulta muy frágil si el pueblo,
en el cual reside, no comprende que la riqueza estratégica con la que cuenta su
suelo no debe entregarse como materia prima. La entrega de materia prima sin
procesar no genera riqueza con distribución real, solo genera riquezas para muy
pocos.
Lo más
difícil no solo es vencer los “lobis” y lograr consenso político interno para
implementar las leyes que garanticen la continuidad de desarrollos integrales
en el país, sino lograr que el pueblo se comprometa y se involucre en impedir
que se destruyan esas políticas, más allá de los gobiernos que se sucedan.
ARSAT 1 y 2 son ejemplos que nos permiten ver que solo con la ley no alcanza.
La soberanía
en el litio, una vez establecido el consenso político y el pacto social de
resguardo, se convierte en un proceso de corto plazo pero que debe ser
continuamente reafirmado.
Latinoamérica
ha demostrado que, si se lo permiten, es capaz de lograr grandes desarrollaros
tecnológicos. La explicación es muy simple: el único órgano humano que responde
de la misma manera en cualquier lugar del mundo es el cerebro. Si está bien
alimentado y bien educado resuelve los problemas con la misma facilidad de
aquellos que lo hacen en el mal llamado ‘primer mundo’.
EL GOLPE DE BOLIVIA HUELE A LITIO
El Ciudadano de Chile (www.elciudadano.com)
Bolivia ha
sido un país marcado, desde tiempos de la colonia, por la minería. Y si hay un
departamento que representa esto como ningún otro, es el de Potosí. “Esta
ciudad condenada a la nostalgia, atormentada por la miseria y el frío, es
todavía una herida abierta del sistema colonial en América: una acusación. El
mundo tendría que empezar por pedirle disculpas”, escribió sobre su capital
Eduardo Galeano en Las venas abiertas de América Latina en 1971.
El
departamento de Potosí se encuentra hoy en una situación muy diferente. De
acuerdo con un estudio de la Fundación Milenio, desde 2005 –un año antes de que
Evo Morales accediera a la presidencia– hasta 2017, su PIB creció a un ritmo
del 5,5%, con algunos episodios de alta volatilidad y picos, como el del 24,
25% de 2008. Su dependencia de la mina, en todo caso, sigue intacta: sin ella,
el promedio del PIB en ese periodo bajaría al 2,9%.
En 2018 el
PIB alcanzó el 4,1% y la minería representó alrededor de una tercera parte de
este. En Potosí se produce en torno al 80% de los minerales de Bolivia, lo que
supone entre el 55% y 60% del PIB. La minería es el tercer sector productivo y,
por ello, en todo el país, y en Potosí en particular, es estratégico en el
ámbito económico, pero también de gran presión en el ámbito político.
El gobierno
del Movimiento Al Socialismo (MAS) se ha enfrentado en múltiples ocasiones a
esta realidad a lo largo de su mandato. Si bien las políticas extractivistas —a
las que las economías periféricas a menudo se ven forzadas para poder crecer—
condicionan la diversificación de la economía productiva nacional, la apuesta
del ejecutivo de Morales por que el sector minero contribuyera a sus políticas
sociales ha sido clave para que la pobreza se contrajera del 60,6% al 34,6%
durante su mandato, con una reducción en la pobreza extrema del 38,2% al 15,2%,
entre otros logros inapelables.
Esta
posición ha conducido, sin embargo, a Bolivia a una relación conflictiva con
las multinacionales mineras. La suspensión de contratos heredados y los
esfuerzos para controlar un sector clave, han llevado al país ante tribunales
de arbitraje internacionales en diversas ocasiones; enfrentamientos en los que
el gobierno canadiense ha adoptado un papel especialmente beligerante, al
ejercer prácticamente de portavoz de las multinacionales de este país, que
concentran alrededor del 60% del negocio a nivel mundial. Con todo, y a pesar
de que en 2014 ya se estimaba que estos litigios habías supuesto alrededor de
1.900 millones de dólares para Bolivia, el propio Financial Times reconoció que
la política del gobierno de Evo Morales había llevado al país a triplicar la
economía boliviana al tiempo que se había “logrado un récord en reservas de
divisas”.
El litio boliviano
y la disputa geopolítica entre Estados Unidos y China
Un aspecto
constatable durante el mandato de Morales ha sido el descenso de la influencia
de Estados Unidos en Bolivia. Como muestra un estudio del CELAG, el país llegó
a ser uno de los mayores receptores de asistencia estadounidense en el
continente hasta la expulsión del embajador Philip Goldberg y la Administración
para el Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés) en 2008, tras un
frustrado golpe, y de la USAID (Agencia de los Estados Unidos para el
Desarrollo Internacional) en 2013. Entonces, la ayuda cayó vertiginosamente;
con una pequeña interrupción en la tendencia en 2014 y, sobre todo, 2015,
coincidiendo con los meses previos al referéndum constitucional de febrero de
2016.
A pesar de
estos datos, la minería boliviana sigue siendo la principal proveedora de
estaño, tungsteno, hierro y antimonio a Estados Unidos, y una de las más
importantes de cobre, plata, oro y zinc. Sin embargo, las relaciones
comerciales entre Bolivia y Estados Unidos también se han visto notablemente
afectadas por el creciente papel de China en la región: el 21% de las
importaciones del país sudamericano proviene del gigante asiático (que es
además el principal acreedor del país), mientras solo el 7,5% lo hace de
Estados Unidos. Evidentemente, el sector minero también se ha visto
condicionado por esta disputa que, además, involucra a otros actores como
Alemania, Canadá, Rusia o Japón. Y, además de otros factores, para retratar hoy
ese conflicto hay que fijarse en el litio.
Como es bien
conocido, este metal alcalino resulta estratégico para el ámbito tecnológico;
aún más, si cabe, ante las perspectivas de una transición energética que afecta
a sectores como el de la automoción. La empresa estadounidense SRK certificó a
finales de febrero que Bolivia posee 21 millones de toneladas métricas de
litio, lo que supone casi el 70% de las reservas a nivel global. Y todo apunta
a que la demanda de este material al menos se duplicará para 2025. Ese año
aparecía en la agenda del gobierno boliviano para, coincidiendo con el 200
aniversario de la independencia del país, completar el proceso de
industrialización definitivo, con el litio como una parte sustancial de este.
Una alta concentración de este metal se encuentra en el salar de Uyuni, en el
departamento de Potosí, frontera con Chile y Argentina. Es en este triángulo en
el que se estima que se hallaría alrededor del 85% del litio mundial. Pero a
diferencia de lo que sucede en las regiones chilena y argentina, la extracción
del litio potosino requiere de una mayor innovación técnica para adaptarse a la
altura y la humedad que obstaculizan los sistemas de evaporación.
A pesar del
interés en desarrollar una industria nacional de litio, las exigencias de una
inversión de esta magnitud no eran asumibles para Bolivia por sí sola, por lo
que para desarrollar el plan, el gobierno precisaba de capital y experticia
extranjera. Aún así, Morales condicionó la inversión foránea a una alianza
paritaria con la compañía minera nacional, COMIBOL, y con Yacimientos de Litio
Bolivianos (YLB). Así, en diciembre de 2018, se llegó a un acuerdo con ACI
Systems Alemania (ACISA) para explotar el litio del salar de Uyuni con el fin
de producir cátodos y baterías de ion litio. ACISA es una empresa germana que,
entre otros clientes, provee de baterías a Tesla. Además, el pasado febrero,
Bolivia también llegó a un acuerdo con la compañía china TBEA Group para, junto
a YLB, extraer litio de otros dos grandes salares en Coipasa (en el
departamento de Oruro) y Pastos Grandes (Potosí). La entrada de TBEA, junto a
la de otras chinas, como China Machinery Engineering, que ya estaban situadas
en el negocio del litio en el país y habían demostrado la pericia necesaria
para desarrollar nuevas técnicas de extracción —de las que, se criticó, carecía
ACISA—, además de ofrecer buenas perspectivas en el reparto de las ganancias,
se interpretó como una amenaza para las principales mineras transnacionales.
Sin embargo,
y además de otros conflictos mineros, el pasado octubre, apenas unas semanas
antes de las elecciones generales, el Comité Cívico Potosinista (Comcipo)
inició una serie de protestas contra el acuerdo con ACISA, así como contra el
alcanzado con TBEA, para exigir mayores regalías para Potosí por la explotación
del litio. En los convenios se contemplaba un royalty del 3% para el
departamento. Las acciones de protesta incluyeron un paro cívico y la huelga de
hambre de algunos de los dirigentes de Comcipo, con su presidente Marco Pumari
a la cabeza, así como diversos episodios de violencia y racismo contra el MAS.
Tras entablar negociaciones directas con el propio Morales, en las que el
gobierno adquirió diversos compromisos con Comcipo, y a escasos días para las
elecciones, Pumari desconvocó la huelga.
Una vez pasadas
las elecciones, el 4 de noviembre, con el conflicto postelectoral ya desatado
(debido a un supuesto fraude que varios informes ya han desmontado), el
gobierne canceló el acuerdo con ACISA. Para entonces, Pumari ya estaba activo
en otros frentes.
El papel de
Marco Pumari y las protestas de Comcipo
Pumari es un
antiguo militante del MAS, expulsado por haber desfalcado dinero de las
juventudes del partido, del que en agosto pasado se filtró un audio en el que
expresaba la necesidad de apoyar al candidato opositor de CC (Comunidad
Ciudadana), Carlos Mesa, en las elecciones. Para ello reivindicaba, con
expresiones notablemente despectivas, la necesidad de que “todas aquellas
vinchucas, chulupis y todo lo demás” votaran a Mesa para por fin desbancar a
Morales de la presidencia del país.
Pumari
activó la huelga de Comcipo en octubre y lideró las conversaciones con Morales
antes de desconvocarla a escasos días de las elecciones. Pero, ante las
acusaciones de fraude lideradas por el millonario ultraderechista y fundamentalista
católico Luis Fernando ‘Macho’ Camacho, del Comité Cívico de Santa Cruz, no
dudó en ponerse del lado de este, llegando a allanar un domicilio desde donde
denunció que se cometía el fraude para después desdecirse. Con el conflicto
desbocado, Pumari unió su destino al de Camacho, quien –además de disponer de
otros apoyos regionales cercanos a Estados Unidos–, según la información
recogida por el medio argentino El cohete a la luna, el 4 de noviembre se
reunió con representantes consulares de Argentina (a los que habría pedido
asilo si el golpe fracasaba) y de España, a los que habría señalado la
inminente incorporación de las Fuerzas Armadas al golpe.
Ese mismo
día fue el día que el gobierno de Evo Morales anuló el acuerdo con ACISA. Tan
solo dos días después Pumari se reunía con Camacho en un acto público. Y, ante
la lectura que el vicepresidente Álvaro García Linera había hecho de dos
versículos del Antiguo y el Nuevo Testamento para responder a las críticas del
empresario cruceño, en un gesto servil Pumari reivindicaba que “Camacho les ha
hecho leer la Biblia a los herejes”.
Una vez
entregado su capital político a la causa golpista de Camacho y Mesa, Pumari
celebraría por todo lo alto que esta causa alcanzara sus objetivos seis días
más tarde, cuando el Ejército se unió al alzamiento cívico-político-policial y
asestó el golpe definitivo al presidente Morales. Mientras este salía hacia el
exilio en México, Pumari reproducía un guion que resulta ya clásico a toda
oposición derechista en América Latina: aparecía en CNN y acusaba a Cuba y
Venezuela de haber mandado francotiradores contra las protestas postelectorales
sin ofrecer ninguna prueba.
El gobierno
de facto y los intereses estadounidenses
Ante las
crecientes sospechas sobre el papel estadounidense en el golpe de Bolivia
–denunciado por personalidades como Noam Chomsky, Jeremy Corbyn, Bernie Sanders
o Roger Waters–, es de esperar que el gobierno de facto actual de Jeanine Áñez
restablezca una relación preferente con Estados Unidos que dé respuesta a sus
intereses regionales, lo que afectaría tanto a su comercio como a sus
inversiones. (No es de extrañar que, en medio de la feroz represión que ha
desencadenado este gobierno, algunas de sus primeras medidas hayan sido la
expulsión del personal médico cubano en el país, para regocijo de Estados
Unidos, o la salida de la ALBA-TCP).
El sector
minero, y especialmente el negocio del litio, marcará en buena medida este
giro. No en vano, ACISA ya expresó, con la derogación del acuerdo, que estaba
“segura de que nuestro proyecto (…) podrá continuar después de una fase de
calma y clarificación política”. Es de prever que, entre otras, la canadiense
Pure Energy Minerals, también proveedor de Tesla y que ya se posicionó en su
momento con respecto al salar de Uyuni pero no fue capaz de ajustarse a las
exigencias del gobierno de Evo Morales, adopte movimientos significativos si el
contexto político le es favorable. En cualquier caso, la incertidumbre entorno
al litio aumenta con la inestabilidad en el país (unida a la que hay en Chile,
Ecuador y Perú), debido a la enorme inversión que entraña y la resistencia
social a la que ésta podría enfrentarse ante circunstancias como las
actuales.
El golpe de
Estado en Bolivia parece poner en evidencia la creciente preocupación de los
Estados Unidos ante la posibilidad de que un nuevo ciclo progresista se
consolide en el continente. Sin embargo, si bien es cierto que, como diría Hugo
Chávez, el rastro de la OEA en el golpe (del que he hablado en otro artículo)
deja un fuerte olor a azufre, cada día parece más notable que este golpe
también apesta a litio.
*Alejandro
Pedregal es
escritor, cineasta, profesor e investigador. Su libro más reciente, Evelia:
testimonio de Guerrero (Akal/Foca, 2019), recoge el testimonio de la defensora
social Evelia Bahena García en su lucha contra las mineras en el estado de
Guerrero (México). Es doctor por el Departamento de Cine, Televisión y
Escenografía de la Universidad Aalto (Finlandia) y profesor en la Unidad de
Arte Expandido (UWAS) de la misma institución.
EL LITIO, BOLIVIA Y EL GOLPE DE ESTADO
Las reservas de litio
que tiene Bolivia se encuentran entre las más grandes del planeta.
Minuto de Argentina
(www.minutoneuquen.com)
Empecemos
por el principio. ¿Qué es el litio? Es el metal más liviano que existe en la
Tierra y se produce sobre todo a partir de salmueras. Hay reservas de este
metal en 17 países, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS,
por sus siglas en inglés). Las reservas que tiene Bolivia se encuentran entre
las más grandes del planeta con 9 millones de toneladas métricas, aunque
durante el gobierno del expresidente Evo Morales, fueron cuantificadas en 100
millones. Se ubican especialmente en el salar de Uyuni que se encuentra en
medio de los Andes, en el sur de Bolivia.
El litio se
utiliza en varias ramas de la industria. Vidrio y cerámica, baterías (vehículos
convencionales y eléctricos; celulares y computadoras), grasas y lubricantes;
aleaciones de aluminio, farmacéutica y otros procesos industriales y químicos,
son algunos de los usos del metal que tiene el país
sudamericano.
Antes de
ganar la presidencia en 2006, ya el dirigente boliviano Morales, desarrollaba
la idea de dar un vuelco al modelo neoliberal dominante en el país plurinacional. La propuesta
estaba en implementar una política que pusiera el acento en una más justa
distribución de la riqueza para cerrar la inmensa brecha existente entre
una minoría que se enriquecía con la explotación de los recursos naturales y
una gran mayoría campesina e indígena sin acceso a los mínimos derechos como la
salud y la educación. Evo Morales nacionalizó la industria del gas. Y poco
después creó una empresa estatal para la industrialización del litio, asociándose
para ello con empresas europeas.
Un grupo de
investigadores de la red boliviana Marka Abia Yala señalan que en 2018 se
firmaron una serie de acuerdos entre el gobierno argentino de Mauricio Macri
con el Comando Sur y otras instituciones militares y de inteligencia de
Washington, con la supuesta intención de aumentar la presencia militar
estadounidense especialmente en la frontera con Bolivia. Los investigadores afirman que “la geopolítica del litio
se ha transformado profundamente desde una situación muy complicada a una
altamente peligrosa para las economías y la paz regional” y subrayan que la
decisión soberana de Bolivia de nacionalizar la explotación del litio es una de
las causas por las que Estados Unidos apresuró el golpe de Estado en ese país.
Pocas
semanas antes del Golpe que derrocó al presidente Evo Morales, dos noticias
resaltan la importancia del litio.
Una tiene que ver con el lanzamiento del primer auto eléctrico fabricado
por una empresa boliviana con el metal del
país. Y la segunda, la cancelación de un contrato con la empresa alemana
ACISA que planeaba explotar el litio boliviano para la fabricación de baterías
Tesla en Alemania. Como dijo el expresidente de Uruguay José ‘Pepe’ Mujica:
“Bolivia es muy rica, se dice que tiene el 70 % del material imprescindible
para hacer las nuevas baterías (eléctricas). Todos sabemos que en el mundo hay
un cambio energético. No estoy acusando, porque no tengo pruebas, estoy
desconfiando, por la historia”.
LATENTE ATENTADO CONTRA EVO MORALES EN MÉXICO
POR RICOS YACIMIENTOS DE LITIO
La Verdad de México (www.laverdadnoticias.com)
En Bolivia
con respaldo de la CIA grupos conservadores entregaron ya 4 billones de
dólares al año de ese material a empresas estadounidenses, de ahí que por
ordenes de AMLO se recurriera a ex escoltas de Enrique Peña Nieto
que estaban adscritos al desaparecido Estado Mayor Presidencial.
Ricos yacimientos de Litio motivo del Golpe de Estado contra Evo morales.
Conservadores con respaldo de la CIA, entregaron ya 4 billones de dólares de
ese mineral al año a empresas estadounidenses, trascendió en círculos políticos.
Mientras
México le da cobijo “de lujo” al ex presidente depuesto Evo Morales, sale a
relucir que su nutrida guardia formada por ex elementos del Estado Mayor
Presidencial, no es gratuita, sino que es motivada por la posibilidad de un
atentado en su contra, debido a que la verdadera razón de que ocurrió dicho
“Golpe de Estado”, fue la gran riqueza minera del país andino.
Por esta causa sale a relucir la influencia yanqui a través de sus
agencias internacionales como la CIA, para que la golpista Janin Añez un día
después de que se autoproclamó presidenta de facto de Bolivia, entregó ya la
riqueza minera a empresas estadounidenses al firmar decretos a su favor y en
donde sobresalen los ricos yacimientos de Litio, denominado el combustible del
siglo XXI, que se utiliza para la elaboración de pilas y otros componentes para
celulares y hasta baterías para carros eléctricos.
Las
concesiones para empresas del vecino país del norte tienen con un valor
de más de 4 billones de dólares al año, de las que sobresalen una filial de
Tesla Motors de Elon Musk, y a la empresa Ensorcia Metals.
En tanto trascendió que Estados Unidos apoya abiertamente el proyecto de
Elon Musk dueño de Tesla denominado Cybertruck con energía generada por Litio.
Lo anterior lo manifestaron fuentes bolivianas en el exilio, lo mismo que el
actual ex primer mandatario andino.
Riquezas
para EU
Una semana después del golpe y represión a los grupos afines a Evo
Morales, en la Bolsa de Valores de Estados Unidos las acciones de Tesla Motors
se dispararon en un 400 por ciento de su valor, y en filtraciones en redes
sociales se aseguraba que las nuevas condiciones de la empresa recompensaría el
nuevo status de la compañía estadounidense.
Organizaciones
no gubernamentales bolivianas y argentinas denunciaron que la militarización de
las fronteras de Argentina y Chile con Bolivia coincidió con la entrada de la
corporación estadunidense Ensorcia Metals, a la que Buenos Aires y Santiago
entregaron la fabricación de las baterías de litio, a diferencia de Bolivia,
que tiene el mayor reservorio, y que creó una empresa estatal para su
industrialización asociándose con empresas europeas.
Apenas entre abril y mayo de este año el presidente Evo Morales había
presentado al mercado interno la fabricación de un auto 100 por ciento
bolivianos movidos de forma eléctrica por pilas de litio.
El golpe de
estado contra el Presidente Evo Morales se llevó a cabo después de que se
concretaron acuerdos con Rusia China y la India para la explotación de este
mineral energético, es preciso destacar (Ariel Velázquez).
GRABOIS VIAJA A BOLIVIA: "SI LOS GOBIERNOS
NO HACEN NADA, NOSOTROS TENEMOS QUE HACERLO"
Una comitiva integrada por dirigentes sociales y
de derechos humanos irá al país vecino a difundir información y recibir
denuncias de la represión y las violaciones a la ley del gobierno de facto que
encabeza la autoproclamada presidente Jeanine Áñez.
Página 12 de Argentina (www.pagina12.com.ar)
"Si los
gobiernos no hacen nada, los pueblos tenemos que hacerlo". Así graficó el
dirigente Juan Grabois el anuncio del viaje de una comisión de solidaridad con
el pueblo boliviano, integrada por dirigentes de organizaciones sociales y de
derechos humanos. "Bolivia está bajo un gobierno de facto, una
dictadura cívico militar y ha impedido comunicaciones para saber qué es lo que
está sucediendo. Por eso es fundamental la tarea que vamos a hacer",
destacó Grabois acompañado por alguno de los dirigentes que viajarán. "A
las compañeras de pollera se les ha faltado el respeto al igual que a la
Wiphala", aseguró Marisa Llanos Cruz, descendiente de boliviano migrantes
que se afincaron en Argentina.
"Estamos
tratando de suplir la bochornosa posición internacional de la Argentina.
Queremos mostrarle al mundo que no estamos de acuerdo en lo que hace nuestro
gobierno que es avalar tácita o explícitamente la dictadura", señaló a
PaginaI12 Grabois una vez finalizada la conferencia de prensa. El golpe de
Estado que obligó a renunciar al presidente Evo Morales derivó en un gobierno
débil que se vale de la violencia para mantenerse una supuesta gobernabilidad,
apuntada fundamentalmente contra los pueblos originarios y sus organizaciones.
"No solo hubo un golpe, ahora hay una dictadura cívico militar en Bolivia
que tiene que terminarse rápidamente no solamente por los bolivianos, sino por
todos los latinoamericanos. Por la carta democrática del Mercosur y por la seguridad
nacional de nuestro país, no podemos tener una dictadura en nuestra frontera y
quedarnos callados", agregó el dirigente social.
La comisión
está integrada por el abogado y referente de la Confederación de Trabajadores
de la Economía Popular (CTEP), Marisa Llanos Cruz y Marianela Navarro del
Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), la abogada e integrante del Frente
Patria Grande Gabriela Carpinetti, Pablo Graciarena de la organización Xumek,
Cristina Livitsanos de la Asociación Americana de Juristas, Leo Pérez Esquivel
de APDH, Ismael Hall de CORREPI, Carlos Zaidman de la Asociación Ex Detenidos y
Desaparecidos, Mario Andrés Lopez de la APDH Nacional, el ex juez de La PLata
Luis Arias, Natalia Zaracho, dirigente del Movimiento de Trabajadores Excluidos,
y Victoria Freire, socióloga y directora del Observatorio de Género y Políticas
Públicas, entre otros. Una vez en Bolivia mantendrán encuentros con la
Defensoría del Pueblo y con distintas iglesias, donde se encontrarán con
familiares y víctimas de la violencia estatal desplegada a partir del golpe de
Estado.
Con una
bandera de Bolivia en la mesa y una gran Wiphala sostenida por militantes
detrás, Marisa Llanos Cruz apuntó que con el viaje querían "trasmitirles a
los campesinos y trabajadores de Bolivia que no están solos. Los que hicieron
el golpe quieren eliminar la Whipala que representa a los pueblos originarios y
nuestros símbolos", y agregó que "no dejamos de lado la bandera de
Bolivia. Pero es cierto que nos colonizaron y nos dieron banderas de Argentina,
de Brasil, de Paraguay, de Bolivia, pero los hermanos de los pueblos
originarios siguen en nuestras tierras y los tienen que respetar". La
militante del FOL, con la voz quebrada por la emoción, apuntó que
"fundamentalmente vamos para decirle al pueblo boliviano que no están
solos. El pueblo argentino se ha movilizado apoyándolo y ahora vamos a
viajar", y recordó que "a las compañeras de pollera bolivianas se les
ha faltado el respeto y también a la Wiphala".
A su turno
Carpinetti, explicó que parte de su tarea será "elaborar un registro de
denuncias", del que publicarán el método en estos días para
masificarlo. "El mayor problema es que ni siquiera hay
garantías para quienes quieran denunciar violaciones a los derechos humanos. Si
querés denunciar te persiguen", denunció la abogada. La presidenta de la
APDH, María Elena Naddeo, aseguró que "hay una avanzada represiva muy
grave en todo el continente de la mano de gobiernos que le dan más impunidad a
las fuerzas represivas". El integrante de la Asociación de Detenidos
Desaparecidos, Carlos Zaidman, también señaló que "sabemos que cuando
viene un Golpe de Estado de estas características en la región no viene solo ni
aislado, por eso es fundamental organizarse y visibilizar lo que sucede rápidamente".
CHILE Y BOLIVIA, SENTIDOS CONTRARIOS
Chilenos pugnan por sacudirse el neoliberalismo
rapaz y bolivianos enfrentan golpe de Estado sostenido por EU
La Jornada de México (www.lajornadamaya.mx)
Salvador
Allende dijo, en la frontera con su muerte: “en Chile mucho más temprano que
tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para
construir una sociedad mejor. Con un esfuerzo denodado, con una lucha inmensa,
el pueblo chileno hoy se encuentra abriéndolas. Especialmente los jóvenes
quieren asaltar el cielo, quieren todo, una nueva Constitución política, un
nuevo pacto social que destierre al neoliberalismo”.
En junio de 1970, unos meses antes del triunfo electoral de Salvador Allende, Henry Kissinger dijo, en lugar ad hoc y con la arrogancia execrable de un imperio que no ha cesado de ver a América Latina como su patio trasero: “No veo por qué tenemos que esperar y permitir que un país se vuelva comunista debido a la irresponsabilidad de su propio pueblo”. Pronto llegó el golpe de Estado, la imposición de la bota militar y la sumisión del pueblo al atroz experimento neoliberal, en formas extremas. Todo fue reducido al fundamentalismo del mercado, mediante un Estado ocluido, la privatización de todo, la sociedad convertida en espacio de los mercaderes que medraron y prosperaron empobreciendo a las mayorías. La educación, la salud, el agua… fueron privatizados.
El 6 de octubre pasado, el ahora disminuido presidente Piñera acuerda el aumento del precio del Metro. El día 7 declara en la televisión: En medio de esta América Latina convulsionada veamos a Chile, nuestro país es un verdadero oasis con una democracia estable. Ese día el primer grupo de jóvenes desborda –sin pagar– filas, pasos y guardias del Metro; y las mareas multitudinarias comienzan a alzarse; desbordan las plazas en varias ciudades. El día 18 Piñera da marcha atrás al aumento del Metro. La Plaza Italia es rebautizada como Plaza de la Dignidad, y entre ríos de tuits, uno destaca: “Como punta del iceberg aparecen las protestas por el alza de la tarifa del Metro, [pero] existe una parte profunda del iceberg que no se ve… Pensiones indignas, salud precaria, sueldos miserables, educación de mala calidad, licencias médicas por depresión, deuda universitaria vitalicia, supersueldos de la élite política, delincuencia sin control, empleos precarios, Pagogate y Milicogate [los escándalos de corrupción en Carabineros y el Ejército]”. La esposa de Piñera se ridiculiza diciendo que los manifestantes parecen aliens.
En junio de 1970, unos meses antes del triunfo electoral de Salvador Allende, Henry Kissinger dijo, en lugar ad hoc y con la arrogancia execrable de un imperio que no ha cesado de ver a América Latina como su patio trasero: “No veo por qué tenemos que esperar y permitir que un país se vuelva comunista debido a la irresponsabilidad de su propio pueblo”. Pronto llegó el golpe de Estado, la imposición de la bota militar y la sumisión del pueblo al atroz experimento neoliberal, en formas extremas. Todo fue reducido al fundamentalismo del mercado, mediante un Estado ocluido, la privatización de todo, la sociedad convertida en espacio de los mercaderes que medraron y prosperaron empobreciendo a las mayorías. La educación, la salud, el agua… fueron privatizados.
El 6 de octubre pasado, el ahora disminuido presidente Piñera acuerda el aumento del precio del Metro. El día 7 declara en la televisión: En medio de esta América Latina convulsionada veamos a Chile, nuestro país es un verdadero oasis con una democracia estable. Ese día el primer grupo de jóvenes desborda –sin pagar– filas, pasos y guardias del Metro; y las mareas multitudinarias comienzan a alzarse; desbordan las plazas en varias ciudades. El día 18 Piñera da marcha atrás al aumento del Metro. La Plaza Italia es rebautizada como Plaza de la Dignidad, y entre ríos de tuits, uno destaca: “Como punta del iceberg aparecen las protestas por el alza de la tarifa del Metro, [pero] existe una parte profunda del iceberg que no se ve… Pensiones indignas, salud precaria, sueldos miserables, educación de mala calidad, licencias médicas por depresión, deuda universitaria vitalicia, supersueldos de la élite política, delincuencia sin control, empleos precarios, Pagogate y Milicogate [los escándalos de corrupción en Carabineros y el Ejército]”. La esposa de Piñera se ridiculiza diciendo que los manifestantes parecen aliens.
Mientras los
chilenos pugnan por sacudirse el neoliberalismo rapaz, el pueblo boliviano
enfrenta el golpe de Estado sostenido por EU y el intento de la vuelta por sus
antiguos fueros de élites y grupos favorecidos de Bolivia. Quieren para sí,
nuevamente, el neoliberalismo que perdieron y acabar con el Estado
multinacional e indianizado por el movimiento de Evo Morales; quieren suprimir
la igualdad de derechos y oportunidades de los pueblos indios con respecto a
los privilegiados de antes, reimponer el dominio de los apellidos aristócratas,
regresar la historia al momento anterior, el de la subyugación racista que
había empezado a ser desplazada a partir del 22 de enero de 2006, cuando por
primera vez un luchador del pueblo aymara alcanzó la presidencia del gobierno.
Tras el error
de Evo en el nacimiento de su última campaña, su no percepción de los cambios
operados en sus electores, parte de los cuales ya no lo votaron el pasado 20 de
octubre, y no le dieron ya una mayoría superior a 50 por ciento, se conjuraron,
uno tras otro, todos los demonios acechantes: Estados Unidos, propulsando y
sosteniendo el golpe; la OEA, con toda su historia de ignominia; Carlos Mesa,
el derrotado en la elección que señalo; los comités cívicos de orientación
fascista de Santa Cruz; la policía y las fuerzas armadas, sumadas al golpe y
ahora masacrando a los indios bolivianos; los medios de comunicación servidores
de los poderes, siempre presentes; los empresarios que se enriquecieron durante
la larga bonanza económica impulsada por el eficiente gobierno de Morales.
Sin remedio,
más temprano que tarde, en Bolivia también volverán a abrirse las grandes
alamedas. Los tiranos terminan por caer, inexorablemente. Henri Lefebvre una
vez definió: en el mundo real la democracia es la lucha por la democracia: un camino
perpetuo en el futuro previsible. Y es que la democracia será total, o no será.
Condición ineludible es la soberanía de los pueblos; sin ella no pueden ser
tomadas las decisiones fundamentales. Los pueblos avasallados por siglos tienen
en la soberanía una lucha interminable. Condición imperativa de la democracia
es también la justicia social; igualdad efectiva de oportunidades y accesos de
todos, a todos los bienes producidos por la sociedad, mucho más allá de la
igualdad escrita en la ley para fines electorales.
El
neoliberalismo está herido, no muerto. En Chile está de salida: ha perdido su
dominación ideológica. En Bolivia el neoliberalismo está de regreso, pero se ve
aún lejos su posibilidad de reimplantarse.
UN NEO GOLPE DE ESTADO Y UN JUEGO IMPOSIBLE EN
BOLIVIA
Diario Perfil de Argentina (www.perfil.com)
Recientemente,
Andrés Malamud (Universidad de Lisboa), expresó en el diario La Nación con
mucha claridad que: "Un golpe de Estado es la interrupción
inconstitucional de un jefe de Gobierno por parte de otro agente estatal y en
Bolivia se interrumpió el mandato del presidente, no hubo destitución
parlamentaria sino una renuncia forzada por una "sugerencia" y las
fuerzas armadas fueron las que terminaron de definir la situación. Además, el
accionar militar no se justifica por las irregularidades detectadas por la OEA
porque Morales ya había acatado el informe y convocado nuevas elecciones.
Los golpes
de Estado pueden ser: restauradores, moderadores, burocrático-autoritarios o
revolucionarios y Bolivia podría responder a la primera o la segunda opción, en
función del régimen que lo suceda. El restaurador busca reconstruir un orden
anterior, pre-democrático, generalmente conservador y excluyente. El moderador
busca regenerar una democracia herida". A partir de esta exposición
teórico-práctico, aquí sostendremos primero que es cierto y claro que en
atención a los hechos acaecidos hubo un golpe de Estado en Bolivia. No hay
dudas de ello.
A partir de
esto, lo segundo que sostendremos, es la necesidad de discutir la naturaleza de
lo que podemos denominar un neo golpe de Estado. Este neologismo se vuelve
necesario, al decir de Santiago Leiras (UBA) quién twitteó (@Leiras2C)
oportunamente: "Tenemos un gran desafío: crear lenguaje de siglo XXI para
explicar procesos de quiebre institucional de siglo XXI. El último golpe
clásico probablemente haya sido el del año 2002 en Venezuela". Por esto,
proponemos que en Bolivia el neo golpe de Estado bien podría reformularse en
los siguientes términos: Un neo golpe de Estado es aquel comunicado de carácter
indirecto, mediático y con fines a la restricción parcial o total del uso de
los atributos del poder presidencial.
Este neo
golpe de Estado perpetrado en Bolivia fue un mensaje indirecto (en clave de
sugerencia) del líder de las fuerzas armadas, Williams Kaliman Romero, quien
configuró simbólicamente un acto verbal de potencial agresión física efectiva
(enmarcada dentro de una semántica que los actores políticos y sociales
interpretaron como real) y que no hizo más que trasladar la responsabilidad de
los hechos –políticos, jurídicos, sociales y militares- posteriores al propio
presidente, de acuerdo a la reputación ya instalada (valores morales e
institucionales) respecto de Evo Morales, quiera es visto como un actor
político que fraguó su legitimidad y legalidad por el fraude electoral señalado
tanto desde los apoyos internos como de la OEA.
La respuesta
de Morales, por su parte, a esta versión de neo golpe de Estado fue claramente
no responder asumiendo la responsabilidad trasladada por el líder militar
Kaliman sino devolverle el manejo de la situación de crisis asignándole toda la
responsabilidad del conflicto sobreviniente imputándole retroactivamente y
prospectivamente la reputación que ya estaba instalado en el sentido común
(histórico) de las sociedades de América Latina: Las fuerzas armadas son
golpistas. Como bien explica Luciano Elizalde (Universidad Austral), en estos
escenarios se puede ver cómo se configuró claramente un ordenamiento que
permitió ver que: “Donde aparece el líder, la información circula. La aparición
del líder en situaciones complejas genera una mimesis y copia de lo que se dice
y hace. El líder es más importante, como medio de comunicación, que los medios
internos” (2017). De este modo se entiende las la importancia radical de los
sujetos en su dimensión comunicativa y las dinámicas grupales que se sucedieron
detrás de los posicionamientos de Morales y las fuerzas militares.
Así, el
disenso quedó plasmado en su máxima expresión en tanto los principales
liderazgos funcionaron como los principales medios de comunicación del Poder
Ejecutivo y de las Fuerzas Armadas exponiendo un enfrentamiento en grado de
escándalo ascendiente hasta la crisis, en donde las responsabilidades
finalmente fueron asumidas de modo diverso: Uno -el militar- atenuó el
escalamiento del conflicto y el otro -el político- evadió la responsabilidad de
la administración del conflicto.
De ahí, que
continúan en curso dos estrategias discursivas y versiones sobre los hechos en
oposición irrestricta hasta el momento bordeándose la fractura de la sociedad.
Lo que nos queda en este punto por discurrir es si este neologismo es útil o no
a los efectos de poder capturar el comunicado de las fuerzas militares y
analizar sus efectos acaecidos sobre el sistema político.
Finalmente,
como tercer punto a dilucidar, en atención a la imposibilidad sobreviniente de
diálogo real y consensos institucionales mínimos factibles de llevarse a cabo
por parte de los precitados actores, y que la oposición también mantiene una
posición irrestricta amenazante ante toda crítica o divergencia en las figuras
de los liderazgos de Mesa, Camacho y principalmente la auto proclamada
presidenta Jeanine Añez, nos queda por analizar desde una óptica político comunicacional
que estamos presentes ante un gobierno de baja legitimidad, dudosa legalidad y
de carácter transitivo (si fueran finalmente sus únicos fines) con la
responsabilidad fáctica de sortear la crisis o bien ingresar en una dinámica
que podríamos denominar, parafraseando a un término acuñado por Guillermo O`
Donnell, como al juego imposible del Bolivia.
El país
hermano, inmerso en esta dinámica de bloqueos continuos simbólicos y/o reales,
potenciales o actuales entre los principales actores de gobierno y
administración podría transcurrir en este caso en un juego imposible si no se
alcanza el resultado esperable de pacificación y ordenamiento social e
institucional por vía de sus actores representativos habilitándose entonces a
actores militares, no representativos o excluidos, para que influyan con su
apoyo y marquen nuevas reglas de juego y soluciones con fines a dotar de un
nuevo equilibrio y estabilidad al sistema político.
El desafío
ya está en curso mediante la Ley de Régimen Excepcional y Transitorio que
realiza la convocatoria a la conformación de un nuevo Tribunal Supremo para la
realización de nuevas elecciones generales en el país, pero a los que ni
Morales ni García Linera podrían presentarse como candidatos, en atención a los
mandatos consecutivos ya ejercidos en el Poder Ejecutivo. Todo esto entonces,
como caldo de cultivo, expone una condición clave de las democracias
constitucionales actuales.
Marcelo
Escolar (UNSAM) explica que esta condición clave sirve para entender una
importante paradoja democrática, en cabeza de los órganos electorales de
gobierno, quienes tiene que dar certidumbre al proceso electoral pero nos
tienen que asegurar a todos por igual (gobierno y oposiciones) de un resultado
de la votación final nada menos que incierto, es decir, asegurarnos la
incertidumbre del ganador. Es decir, la gobernanza electoral tiene como
finalidad en verdad asegurarnos una incertidumbre. Nadie debe saber, ni
determinar, ni asegurar de antemano, el resultado en una elección. La real
libertad política entonces se pone en juego en la libre elección y decisión
ciudadana sin coerción ni coacción alguna, menos de los que gobiernan. Este es
el desafío actual a concretar por el gobierno de transición y la oposición.
Las
preguntas y escenarios están planteados. Esperemos que las respuestas y
resultados sean lo más civilizados y fructíferos para la estabilidad y
pacificación social en pos de superarse las imágenes de neo golpes de Estado,
oposiciones radicalizadas, conflicto social, gobierno de facto y un nuevo juego
imposible en Bolivia.
DERIVA BOLIVIANA
Diario Co Latino de El Salvador
(www.diariocolatino.com)
Desde Oruro
hasta la Paz, Cochabamba y El Alto; las masivas movilizaciones de la ciudadanía
boliviana, ocultadas por la gran prensa, ya ha recuperado el control de dos de
las cámaras del legislativo para el MAS, a pesar de la represión desplegada
desde el régimen de facto establecido en la capital, que ya costara como mínimo
veintitrés bolivianos asesinados en la semana transcurrida desde el golpe y por
las fuerzas policiales y militares, cinco de los cuales fueran ejecuciones
confirmadas por el personal sanitario el viernes 15, en Cochabamba, a la vez
que se concretara un cierre mediático nacional, censurándose por completo la
información surgida del proceso boliviano, de entre lo que podemos destacar la
agresión sufrida por la misión médica cubana, el mismo día por parte de
elementos de la fuerza pública boliviana que no solo les agredió físicamente,
además de negarles agua mientras fueron interrogados, o que se comunicaran con
su misión diplomática, en el marco de la campaña que en contra de ciudadanos
cubanos se emprendiera, acusándoles de ser los organizadores de las protestas,
desde los estamentos golpistas, y que solo fueran liberados luego que la jefa
de la misión hiciera pública denuncia del atropello en cuestión.
Tales
acciones por parte del golpismo son análogas únicamente a las violaciones
sufridas a manos de los regímenes militares, que también fueron ilegítimos, y
que solo se sustentaron en el apoyo de EE.UU.
Tampoco en
el seno de la OEA el apoyo al golpismo es granítico, pues las legaciones
mexicana, nicaragüense, cubana y paraguaya, no solo la cuestionan, sino además
señalan la complicidad del organismo en el golpe, al tiempo que el secretario
general del mismo elucubra que aquello fue “…un autogolpe fracasado…”.
Tales hechos
evidencian crudamente que la OEA es apenas un justificador del intervencionismo
estadounidense.
Otros hechos
destacables son el retiro de las credenciales de al menos el 80 % del personal
diplomático boliviano en sedes extranjeras, al tiempo que Bolivia anuncia que
se retira de Una Sur, ALBA y la Celag, en un movimiento que busca el
rompimiento con los proyectos político económicos que permitieron superar el atraso
económico, y que lograra el modelo desarrollista alabado por el BID, FMI, BM,
sacando de la pobreza a 4,000,000 de personas, liberado del analfabetismo al
país en pleno, y logrando una participación ciudadana en los hechos políticos
sin paralelos en el cono sur o en la historia reciente regional.
Entonces, el
soberano desafía, se crece en la organización de los sectores populares en
resistencia, declarando su disposición a la lucha, en el afán de recuperar lo
que se le ha arrebatado: las conquistas políticas, económicas y sociales
logradas en los últimos trece años, en la incursión política de los
desheredados, en el arribo de los excluidos, en la concreción de una democracia
efectiva.
Y ello, es
uno de los problemas, pues como en ningún otro lugar en nuestra América,
Bolivia ha conquistado -con sus peros- una democracia efectiva, esta, que se
defiende ahora en las calles del país.
“NO NOS FUIMOS DE BOLIVIA NI POR LADRONES NI POR
ASESINOS”: GARCÍA LINERA
NTN 24 de Argentina (www.ntn24.com)
Álvaro García Linera, exvicepresidente de Bolivia, ofreció una entrevista
al programa La Tarde NTN24 en la que habló sobre lo que hubo detrás de la
renuncia de Evo Morales y su gabinete y la actualidad política y social del
país.
García
Linera aseguró que, aunque Evo Morales renunció, “han pasado casi 15 días, 32
muertos, cerca de 400 heridos, cerca de mil detenidos y el resultado es el
mismo”, denunció.
“A pesar de renunciar a nuestra victoria electoral (…) estos grupos
prefirieron desconocer eso y hacerse con el poder”, detalló.
Además, el
exvicepresidente señaló que, contrario a lo que se ha dicho, la renuncia de Evo
se ejecutó únicamente para evitar “un derramamiento de sangre”.
Asimismo, García dijo que la violencia que vive el país no es por Evo
Morales, sino que “es entera responsabilidad de quienes usurparon el gobierno”.
García
Linera se refirió al video que circula en internet en el que presuntamente se
escucha a Evo Morales pidiendo a sus seguidores que bloqueen las calles y no
permitan la entrada de comida al país.
A lo que respondió justificando el supuesto pedido de Morales porque,
según él, el bloqueo es un método de los campesinos para “defenderse de la
matanza”.
Por otra
parte, el exfuncionario del gobierno de Evo, dijo que merecen volver a Bolivia
porque “no nos hemos ido ni por ladrones ni por asesinos, sino porque nos
obligaron a renunciar”.
“Tenemos derecho a regresar a nuestro país, no vamos a ser candidatos
porque nos temen”, agregó.
“Yo hago
política desde los trece años para ayudar a los pobres (…) no ha sido para ver
como uno queda registrado en los manuales de historia”, detalló el
exvicepresidente.
Asimismo, señaló que, a su juicio, el futuro de Bolivia es “muy triste”
porque se convirtió en un país con un “discurso racializado por parte de las
autoridades”.
GARCÍA LINERA ADVIERTE QUE SIN GARANTÍAS
DEMOCRÁTICAS NO PUEDE HABER ELECCIONES EN BOLIVIA
Grupo la Provincia de Argentina (www.grupolaprovincia.com)
El ex
vicepresidente boliviano Álvaro García Linera, asilado en México junto al ex
presidente Evo Morales luego de que ambos se vieron forzados a renunciar por
presión de las Fuerzas Armadas, dijo que en su país no puede haber elecciones
si antes no se restituyen las garantías democráticas.
García
Linera participó ayer junto a Morales de un encuentro con estudiantes de la
Universidad Nacional Autónoma de México (PUIC-UNAM), donde analizaron la
situación que los llevó a abandonar el poder en su país.
"Vamos
a ir a elecciones, tiene que haber elecciones en Bolivia. Nosotros no vamos a
ser candidatos, pero tenemos derecho de hacer política al lado de los
nuestros", expuso el ex vicepresidente.
"¿Qué
es lo que viene ahora?", cuestionó a la audiencia y respondió "que se
vayan los golpistas porque no puede haber elecciones si no se restituye las
garantías democráticas", según reprodujo la agencia de noticias EFE.
Antes, en su
participación, Morales aprovechó para mandar un mensaje al pueblo boliviano y
al movimiento indígena.
"Lo que
pasó en estas últimas semanas nos enseña que es mejor estar unidos y cómo un
pensamiento de liberación, un programa del pueblo, y sobre todo pensando en las
nuevas generaciones, este movimiento político por ahora estará fuera del
gobierno", apuntó.
Dijo que el
pueblo boliviano "recién se dan cuenta como es vivir con un gobierno de
facto, con militantes de la derecha".
Durante su
discurso una decena de bolivianos residentes en México se manifestaron en la
sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli, pero su protesta
fue acallada por las más de 1.300 personas que le gritaron a Evo
"¡Presidente, presidente" y "¡No estás solo, no estás
solo!".
El ex
mandatario lamentó la muerte de más de 30 personas y las decenas de heridos en
Bolivia en las últimas semanas y dijo que le duele "cómo están destrozando
lo que hemos construido para un liberación económica del pueblo boliviano.
En Twitter,
Morales dijo "me llegó al corazón el acto de solidaridad organizado por
hermanas y hermanos mexicanos, cargados de poesía, compromiso y firmeza se
pronuncian contra el golpe de Estado y las masacres en Bolivia".
EVO MORALES SABE QUE SU PRESIDENCIA HA TERMINADO
El expresidente de Bolivia salió huyendo de su
país y vive, por ahora, en una base militar mexicana, en donde se siente
encerrado y nostálgico por la nación que dejó atrás.
New York Times de EEUU (www.nytimes.com)
Durante su
exilio en Ciudad de México, Evo Morales, el presidente derrocado de Bolivia,
vive en una base militar donde, dice, pasa buena parte del día recibiendo
llamadas de bolivianos que le piden ayuda.
A más de
5000 kilómetros de su país, donde los políticos amenazan con detenerlo si
regresa, Morales trata de seguir siendo un presidente que le cumple a sus
seguidores, quienes lo ven como el salvador de Bolivia.
Pero todo
indica que, como advirtió durante una entrevista reciente, Morales reconoce que
su tiempo en el poder, y su prestigio mundial como el primer presidente
indígena de Bolivia, ha llegado a su fin.
El
expresidente dijo que, después de pasar casi catorce años en el poder, dejó su
país con poco más que la ropa que llevaba puesta. Se postuló para un cuarto
mandato a la presidencia y se declaró ganador, pero el resultado de la elección se puso en disputa.
Mientras los
manifestantes llenaban las calles y la policía y los militares se ponían en su
contra, un avión militar mexicano lo sacó del país y el 12 de noviembre llegó a
la capital de México. Morales dijo que todo sucedió tan rápido que dejó su
pasaporte boliviano.
Al inicio de
una entrevista realizada el 22 de noviembre en las oficinas de The New York
Times en Ciudad de México, Morales dijo: “Yo ya soy mexicano, mira…”, y mostró
bromeando su visa de residente con estatus de asilo político, expedido por el
gobierno mexicano.
Fue
trasladado a la entrevista en una camioneta y, en la calle frente al edificio,
lo custodiaban exmiembros del desaparecido Estado Mayor Presidencial mexicano,
un cuerpo de seguridad.
En una
sesión de fotos, levantó el puño con el gesto desafiante de un líder
revolucionario.
Dijo que
todavía es el presidente de su país, al menos hasta el 22 de enero, cuando
finaliza oficialmente su mandato, y por eso piensa que se le debe permitir
regresar a Bolivia y terminar los últimos dos meses de su presidencia.
“Aquí, ¿cómo
hacemos?”, preguntó con lamento. “Tenemos que defender, ya no solo a Evo, sino
a los programas sociales, bonos, rentas, los pequeños programas”.
Está
convencido de que existe una rotunda exigencia para que regrese a Bolivia y que
el país no puede progresar sin él. Según algunos medios, su partido, que tiene la mayoría en el
congreso, ha propuesto que a él y a su círculo cercano se les otorgue inmunidad
de enjuiciamiento.
Pero los
eventos sucedidos en La Paz, la capital de Bolivia, se han precipitado desde
que se marchó del país. En medio de las continuas protestas de sus partidarios
y las violentas acciones represivas de las fuerzas de seguridad, su partido y
la oposición trabajaron para aprobar una ley para convocar nuevas elecciones, según informó
The Associated Press.
Morales no
dio importancia a que algunos miembros de su propio partido hayan dicho que
presentarán candidatos en las nuevas elecciones, dijo que solo son “algunos
compañeros que no están escuchando el pedido clamoroso del pueblo”.
Sin embargo,
prometió apoyar al candidato a la presidencia que elija su partido; es, como lo
calificó, una obligación. Y agregó que ahora que está “liberado de ser
presidente”, tendrá más tiempo para hacer campaña por los candidatos de su
partido.
En un tono
mucho más moderado que en otras apariciones públicas recientes, Morales habló
con nostalgia de Bolivia. El líder de toda la vida del sindicato cocalero dijo que
extrañaba la hoja de coca, un estimulante que muchos bolivianos mastican.
Bromeó sobre la comida mexicana, demasiado picante para su gusto, y dijo que
tenía que aprender a comer tortillas en lugar de quinua.
El gobierno
mexicano le ofreció asilo a Morales y lo recibió como si fuera un
dignatario: fue atendido por el secretario de Relaciones exteriores cuando
aterrizó en Ciudad de México y la jefa de gobierno de la ciudad lo nombró huésped distinguido.
El
presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, asignó oficiales militares
que pertenecían a la guardia presidencial, un cuerpo de seguridad que fue
disuelto, para proteger al líder boliviano. El gobierno lo hospeda en una
instalación militar que, le pidieron, no identificara por razones de seguridad.
Admite que
ahora se siente enjaulado y comienza sus días con un trote en el gimnasio de la
base a las 6 de la mañana. Vive allí con el pequeño séquito que lo acompañó al
exilio, incluido su vicepresidente, Álvaro García Linera, y su ministra de
Salud, Gabriela Montaño.
Pero dice
que no se arrepiente de su decisión de postularse para un cuarto mandato, o de
las elecciones presidenciales en octubre, que desencadenaron disturbios luego
de que declaró su victoria.
Morales
afirma que renunció a la presidencia tres semanas después para salvar la vida
de sus partidarios, cuyas casas habían sido incendiadas por los opositores.
Decidió irse
a México para salvar vidas, tal vez incluso la suya. Dijo que un miembro de su
equipo de seguridad le había mostrado un mensaje de texto anónimo que alegaba
la existencia de una recompensa de 50.000 dólares por su cabeza para arrestarlo
o incluso matarlo.
Reconoció
que no fue la decisión que tomaría un revolucionario, mientras citaba el lema
de Fidel Castro: “Patria o muerte”. Y comentó que, aunque al principio se
resistió, sus ministros lo persuadieron para que se marchara.
El gobierno
mexicano envió un avión, pero no pudo aterrizar durante varias horas porque el
ejército boliviano impuso diversos obstáculos burocráticos. Finalmente, cuando
transcurrió un día entero después de su renuncia, el avión logró despegar.
“Cuando
estaba en el avión de México, dije: ‘Ya salvamos la vida’”, recordó.
Mientras iba
de salida, dijo, escuchó que el gobierno estadounidense había hablado con su
canciller y le ofrecieron enviarle un avión para sacarlo del país. Recuerda que
en ese momento solo pudo bromear: “Tal vez me llevan a Guantánamo”.
Washington y
sus opositores políticos estaban decididos a mantenerlo fuera de Bolivia, dijo.
“Ya no estoy desesperado por ser candidato a presidente, pero que me den los
derechos políticos para volver”, advirtió. “¿Por qué le tienen tanto miedo a
Evo?”.
KEVIN O’REILY: “EE.UU. ESPERA QUE SE RESPETE LA
NO INTERVENCIÓN EN BOLIVIA”
Segundo Enfoque de Colombia
(www.segundoenfoque.com)
El subsecretario de Estado Adjunto en la Oficina de Asuntos del
Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos, Kevin
O’Reilly,
aseguró en conferencia de prensa telefónica, desde Washington DC, que el gobierno de su país espera que se respete
la no intervención de Bolivia. “Tiene
que ser asunto de los bolivianos y esperamos que todos respeten la no
intervención”, manifestó O’Reilly.
En medio de
la difícil situación que están viviendo los ciudadanos del Estado
Plurinacional de Bolivia, entre las muertes y los rumores que surgen de
los sectores contrarios a Evo Morales
y que afirman que hay una intención de
Cuba o Venezuela de llevar adelante una intervención en la región, el
secretario se refirió: “Respetamos sus raíces y es un desafío para
los bolivianos enfrentar todo lo que está ocurriendo en Bolivia”.
“Prestamos atención al riesgo de
intervenciones desde afuera del país y denunciaremos a los que piensen que sea
una actitud legítima. Los bolivianos en paz y dialogando, tienen que
defender de forma democrática su constitución”, aseguró Kevin O’Reilly.
La violencia
no es el camino
Por otro
lado, Kevin O’Reilly destacó que la
violencia no tiene lugar en la solución de las disputas políticas y sociales,
por lo que aquellos que protestan y las instituciones del Estado de
Seguridad “tienen que respetar el Estado de Derecho de la protesta
pacífica” algo que el secretario de Estado remarcó como “esencial
para cualquier sociedad democrática”.
“Es importantísimo el diálogo y la paz para evitar muertes innecesarias
como estas.
Condenamos la violencia cuando las autoridades determinan que se usó la fuerza
sin justificación, y esa persona tendrá que enfrentar las penas legales
correspondientes”, advirtió el funcionario estadounidense.
Estados
Unidos analiza el envío de ayuda humanitaria
En
referencia a si Estados Unidos le brindará asistencia humanitaria al pueblo
boliviano, el secretario de Estado
expresó que se encuentran analizando las formas para poder ayudar pero
que la mejor manera de es permitir que prospere el diálogo, poner fin a los
bloqueos y a las amenazantes cercas, ya que Bolivia tiene todo
la capacidad para responder a estos déficit.
“El Art. 16 garantiza el acceso a la
alimentación para la gente, como un derecho a vivir de la Constitución Nacional
de Bolivia. Ojalá que la gente respete esto y que nadie hable
de la posibilidad de imponer bloqueos o restricciones o el derecho del acceso
al agua y a la alimentación”, dijo O’Reilly.
Por otro
lado, Kevin O’Reilly se refirió a las
falsas noticias que circulan a través de distintos medios de comunicación y
redes sociales. Sobre esto, explicó que hay gente que aprovecha los
debates de la sociedad para fomentar la confusión, el aire de división y la
conspiración.
“Es
importante que todos nosotros analicemos este tipo de información con claridad
y que miremos la realidad de lo que
está sucediendo en nuestras sociedades y no la desinformación”, finalizó
el funcionario estadounidense.
RITA SEGATO: "YO NUNCA NEGUÉ QUE HUBO UN
GOLPE EN BOLIVIA"
LM de Argentina (www.lmneuquen.com)
La
reconocida antropóloga feminista Rita Segato habló públicamente por primera vez
en la Legislatura
de Neuquén luego de ser, durante la última semana, foco de críticas a raíz de
su análisis sobre la situación política en Bolivia.
La
especialista reafirmó que lo ocurrido en ese país “fue un golpe de Estado” y
aseguró que ella fue “víctima de un linchamiento” producto de declaraciones
suyas tergiversadas y sacadas de contexto por parte de un medio nacional.
“Yo dí una
declaración oral muy bien pensada y grabada por solicitud de una radio de La
Paz, en la cual pensé cada palabra. Lo que hizo Infobae fue poner una textual
mía, sacarla de contexto y absolutamente tergiversar. Yo sí digo que hay un
golpe en Bolivia, sólo que digo que es un nuevo tipo”, aseguró Segato en el
tramo final de su exposición conjunta con la politóloga María Esperanza Casullo
y la vocal del Tribunal Superior de Justicia, María Soledad Gennari, bajo el
título “Género y política en Latinoamérica”.
Así, Segato
retomó su visión sobre lo sucedido en Bolivia y criticó el análisis “local” que
se realiza sobre ese país, con una visión dicotómica y binaria. “Estamos
leyendo la situación de Evo Morales y la situación de Bolivia a partir de la
óptica argentina que es muy distinta. Estamos hablando de un país de mayoría
indígena. Y además de mayoría indígena, muy diversa entre sí”, indicó en
referencia a la existencia del pueblo indígena tanto burgués como de las clases
bajas.
“Soy
plenamente consciente de que hay una lectura argentina de Bolivia que es muy
distinta a la lectura boliviana de Bolivia”, consideró. Planteó que “nosotros
lo estamos filtrando desde nuestros problemas y nuestros antagonismos aquí”.
Además, dijo
que Álvaro García Linera (ex vicepresidente de Bolivia) no configuraba un
personaje querido para la sociedad. “He hecho muchos viajes a Bolivia, he
interactuado con diversos sectores bolivianos y no he encontrado nunca un
boliviano que tuviera simpatía por Linera. Siempre fui yo más simpatizante de
Linera que los bolivianos”, señaló.
“Yo no dudo
en decir que hubo un desgaste tremendo de la figura de Evo frente a su propia
sociedad. Y claro que hubo un golpe, yo nunca negué que hubo un golpe, pero es
un golpe de un nuevo tipo”, aseveró. La antropóloga precisó que “frente al
desgaste y su impopularidad, ahí se da el golpe”.
Las críticas
a Segato surgieron el martes pasado cuando a partir de una entrevista brindada
a Radio Deseo en La Paz, el portal Infobae tituló: “Rita Segato, durísima con
Evo Morales: dijo que 0no fue víctima de un golpe’ y recordó su machismo y
autoritarismo”, lo que despertó interpretaciones en torno a si, para Segato, los
hechos ocurridos en Bolivia configuraba o no un golpe de Estado.
“La visión
es totalmente binaria. (Pero) que (Luis Fernando) Camacho sea una figura
inaceptable y malvada no implica que Evo (Morales) sea una figura perfecta. Hay
un endiosamiento de su figura incluso mayor que el que existía antes”, había
expresado la antropóloga al medio radial.
Intervención
por Nadia Kubatov
Durante la
presentación del evento, antes del inicio de la conferencia, Socorro
Violeta realizó una intervención para denunciar el acto de discriminación hacia
Nadia Kubatov, la abogada a quien la Legislatura le rechazó la semana pasada el
pliego para ocupar el puesto de defensora pública por ser feminista.
“En esta
Legislatura se discrimina y persigue políticamente a feministas”, “Armar
debates sobre perspectiva de género y discriminar a feministas.
¿Contradicciones machistas de esta Legislatura?”, esbozaban algunos de los
carteles que, a modo de protesta, levantaron las activistas del espacio de
asesoramiento y acompañamiento a víctimas de violencia, del cual forma parte
Kubatov.
BOLIVIA: CUÁLES SON LOS
PLAZOS PARA LA ELECCIÓN DEL NUEVO PRESIDENTE Y POR QUÉ JEANINE ÁÑEZ PODRÍA
GOBERNAR HASTA AGOSTO DE 2020
Constitucionalistas consultados
por Infobae explicaron cuáles son los pasos que hay que seguir y por qué la
mandataria provisoria no llegará a entregar el poder el 22 de enero, cuando
vencía el mandato de Evo Morales.
Infobae de Argentina (www.infobae.com)
El calendario
electoral que debe aprobar el nuevo Tribunal Supremo Electoral obligaría a extender el mandato de la
presidenta transitoria de Bolivia, Jeanine Añez, que concluye el 22 de enero de
2020. De lo contrario, se entraría a un vacío de poder, según algunos
abogados constitucionalistas, que calculan que las elecciones presidenciales se deberían realizar, en el mejor de los
casos, en marzo o abril del próximo año, sin considerar la posibilidad
de una segunda vuelta, que se realizaría en los siguientes 45 días, según la
ley promulgada por Añez el pasado domingo en Palacio de Gobierno, en presencia
de la presidenta del Senado, Eva Copa, del partido de Evo Morales.
Con estos
cálculos, la presidenta transitoria tendría que entregar el poder al nuevo
gobierno elegido en la votación presidencial en junio de 2020, aunque algunas
fuentes políticas consideran que la transmisión del mando podría producirse el 6 de agosto,
considerada una fecha emblemática de la historia de Bolivia, que celebra el
inicio de su independencia como República.
Aunque el
movimiento cívico opositor a Evo Morales y los llamados movimientos sociales,
allegados varios de ellos al expresidente, adelantaron su demanda de realizar
las elecciones antes de que concluya el mandato constitucional el 22 de enero,
el nuevo vocal del Tribunal Electoral,
Salvador Romero, que fue posesionado el lunes pasado por la presidenta
Añez, adelantó que es técnicamente imposible realizar la votación
antes del 22 de enero y que, incluso, los 120 días establecidos por ley
representan trabajar en forma apretada.
Abogados constitucionalistas
y expertos electorales, como Paul Antonio Coca, Carlos Borth y Fernando
Castedo, consideran que es casi
imposible que haya elecciones antes del 22 de enero, cuando el ex presidente
Evo Morales terminaba su mandato.
Para Coca, hay aspectos técnicos y jurídicos que hacen
inviable ese tiempo. Explicó que son tres meses establecidos para la
campaña proselitista,que en el mejor de los casos se puede reducir a dos. Para
elegir a las nuevas autoridades electorales se necesitan al menos 20 días. “En
ese periodo se debe realizar previamente la convocatoria, depuración de
candidatos, discusión interna, análisis de los currículum, entrevistas e
impugnaciones”, refirió.
De su parte,
el senador Oscar Ortiz dijo que hasta este
jueves se aprobará en el Legislativo el reglamento de elección de los vocales
electorales y, desde ese momento, corren 20 días de plazo y otras 48 horas para
que el nuevo TSE haga la convocatoria a las nuevas elecciones.
En el
cálculo del ex vocal electoral, Fernando Castedo, es probable que para el 20 de diciembre se tengan conformados los
tribunales electorales y en ese momento se podrá llamar a los comicios
generales.
Por
consiguiente, quedaría sólo un mes, por lo que será imposible realizar las
elecciones antes del 22 de enero, cuando se requiere al menos cuatro meses para la primera vuelta y 45 días para
la segunda vuelta, además de dos semanas adicionales si es que se deben repetir
las votaciones en algunas mesas.
Se debe
considerar que también ha surgido la
demanda y el acuerdo de sanear el actual padrón.”El nuevo Tribunal
Electoral es el que debe aprobar el calendario, el empadronamiento de
ciudadanos, la inscripción de candidatos, nuevas elecciones, repetición de
mesas, primera y segunda vuelta. En el
mejor de los casos, la primera vuelta sería en marzo y la segunda en abril. O
puede ocurrir la primera en abril y la segunda en mayo”, sostuvo.
Cómo y quiénes definen la prórroga
Como la
Constitución Política del Estado no establece la prórroga de ningún mandato
presidencial, se tendrá que tomar una “salida
especial o de emergencia”, más que constitucional, para que no se
produzca un vacío de poder después del 22 de enero, cuando concluye la
presidencia transitoria de Jeanine Añez y el mandato de los diputados y
senadores, según constitucionalistas.
“No puede
haber un solo día de vacío de poder en Bolivia. Hay dos entidades que deben dar
respuesta a la prórroga del mandato de la presidenta transitoria. El Tribunal
Electoral es el llamado a definir el calendario de los comicios y es el que
debe recomendar la ampliación del gobierno transitorio, considerando que el
país no puede quedar descabezado. Por su parte, es el Tribunal Constitucional
el que debe decir que si lo que se está haciendo es bueno o malo. Es a esa
instancia ante la que después algún diputado, senador o ciudadano puede acudir
para impugnar las decisiones”, explicó el constitucionalista Paúl Coca.
Recordó que el Tribunal Constitucional ya dio una línea
sobre la sucesión al avalar la asunción de Jeanine Añez a la presidencia
transitoria, con el argumento de que no puede haber vacío de poder.
Tanto la
presidenta transitoria, Jeanine Añez, como el nuevo vocal del TSE, Salvador
Romero, adelantaron el lunes pasado que ellos no son los que se deben
pronunciar sobre la prórroga del gobierno de transición.
Otra de las
dificultades surgidas en la transición es la convocatoria a las elecciones subregionales de gobernadores y
alcaldes, previstas para marzo. Los expertos recomiendan que se realicen
cuatro meses después de las presidenciales, lo que también obligará a la
extensión de los mandatos de estas autoridades locales, con la misma vía que se
debería realizar para las nacionales.
EN BOLIVIA,
LAS LLANURAS AGRÍCOLAS CRITICAN A MORALES Y COMBATEN LA
"CENTRALIZACIÓN"
France 24 de
Francia (www.france24.com)
"Nos
tienen fobia y nos dicen racistas, separatistas. Todos los malos adjetivos son
para nosotros". En las llanuras de Bolivia, lejos de los Andes, los ojos
azules del ganadero José Roca reflejan su cólera con los políticos y su
satisfacción con la salida de Evo Morales.
Sus
500 vacas y sus 100 hectáreas de tierras poco tienen que ver con el altiplano
andino. Aquí, en el departamento rural de Santa Cruz, a 500 km al este de La
Paz, la llanura se extiende hasta donde alcanza la vista y el clima es muy
caluroso.
El
abuelo del ganadero de 55 años llegó de España en 1910 "para crear una
nueva Bolivia". Un siglo después, Roca tiene 14 empleados, sus vacas
producen 6.000 litros de leche al día y acaba de invertir 150.000 dólares en
una nueva máquina de ordeño.
Se
siente boliviano, pero encarna los recelos de numerosos habitantes de Santa
Cruz respecto al poder político de la Paz y del expresidente Morales, que
dimitió el 10 de noviembre a raíz de protestas provocadas por unas polémicas
elecciones presidenciales.
Según
él, lo único que hizo el primer presidente indígena de Bolivia fue
"dividir a los bolivianos" y beneficiar a los cocaleros del Chapare
(centro), el bastión del expresidente situado en las estribaciones de los
Andes, donde los indígenas son mayoría.
En
casi 14 años en el poder, Morales hizo mucho por intentar reparar siglos de
injusticia en ese país donde el 62% de los 11,3 millones de habitantes son
indígenas.
Su
acto más fuerte fue la Constitución de 2009 que dio, entre otras cosas, un
amplio espacio a la cultura aborigen al reconocer 36 lenguas oficiales. La
justicia indígena se considera además tan válida como la justicia ordinaria.
Pero
Santa Cruz, donde viven numerosos descendientes de europeos, se consideró perjudicada
por la política del exmandatario.
El
sector local de los productores de leche "ha tenido casi cero ayuda del
antiguo gobierno", lamenta Klaus Frerking, jefe de la federación
departamental de ese gremio.
Eso
se notó en las urnas. En las presidenciales del 20 de octubre, más del 46% de
los electores del departamento de Santa Cruz votó a favor del candidato
centrista Carlos Mesa, frente a cerca del 35% que lo hizo por Morales.
El
expresidente se declaró victorioso de las presidenciales con el 47% de los
sufragios totales y más de 10 puntos de ventaja sobre Mesa, antes de que la
oposición denunciara un fraude y que la Organización de los Estados Americanos
señalara irregularidades en los comicios.
-
7% de crecimiento -
Santa
Cruz y el sector lácteo estuvieron al frente de las protestas poselectorales.
Durante tres semanas, miles de cruceños bloquearon carreteras para exigir la
renuncia de Morales.
"Hemos
sido uno de los puntales que ayudó a la lucha de la recuperación de la
democracia", afirma Frerking.
Aislado
y abandonado por el Ejército, Morales dimitió y se asiló en México. La senadora
derechista Jeanine Áñez asumió la presidencia interina tras su marcha e hizo
anular las presidenciales del 20 de octubre.
Aunque
ha quedado de manifiesto en las últimas semanas, la desconfianza de Santa Cruz
hacia La Paz viene de antes.
El
departamento goza de buenos resultados económicos. "Bolivia viene
creciendo a un ritmo promedio de 4,5% por año en los últimos 10 años, y Santa
Cruz al 7% anual", recuerda Fernando Hurtado, presidente de la Cámara de
Comercio e Industria de la región.
La
zona produce el 70% de los alimentos consumidos en Bolivia, pero se siente
maltratada por la "centralización", afirma Rómulo Calvo,
vicepresidente del Comité pro Santa Cruz, un movimiento cívico autonomista.
"Si yo quiero exportar, tengo que irme a La Paz para hacer los trámites.
Si quiero importar, lo mismo", se indigna.
La
rivalidad con la capital alcanzó su cima en 2008 con un referéndum organizado
por las autoridades locales para más autonomía. El sí ganó ampliamente, pero el
gobierno central nunca reconoció el resultado.
Tras
la votación, Morales "nos trató de racistas y separatista. ¡Pero eso es
falso!", afirma Roca.
Para
él, la centralización se resume con un ejemplo: el de las escuelas construidas
por el gobierno en Santa Cruz, donde la temperatura media es de 25 grados, con
planos adaptados a las regiones andinas, donde el tiempo ronda a menudo los 0
°C por la noche.
"Necesitamos
grandes ventanas, no edificios cerrados", clama.
SORDOS
RUIDOS OÍR SE DEJAN...
Chile,
Bolivia y Colombia: la Cordillera está en llamas. En Colombia y en Chile reinó
el toque de queda y ambos ejércitos salieron a las calles para reprimir las
protestas violentas, mezcladas con los cacerolazos que hace casi medio siglo
cercaron al socialismo chileno de Salvador Allende.
Diario Panorama de Argentina
(www.diariopanorama.com)
En
Chile, los uniformados apenas contienen el descontento, mientras apuntan a los
ojos de los manifestantes: trescientos heridos con lesiones oculares se
registraron las últimas semanas.
En Bolivia no pueden siquiera enterrar a sus muertos. El fenómeno que altera la paz andina es nuevo: protestan todos. El descontento une a estudiantes hartos de modelos educativos que son herencia de dictaduras, a trabajadores que exigen mejores condiciones laborales y q quienes exigen el final de una escandalosa brecha de desigualdad; protestan los indígenas bolivianos y los afrocolombianos; protestan las mujeres, la comunidad LGTB, los sectores de la clase media que ven deslizarse el futuro hacia el sótano de la pobreza; en Colombia, donde los reclamos sociales estuvieron durante décadas a la sombra del conflicto armado, protestan los dirigentes campesinos ante el asesinato de sus líderes: 486 desde 2016, según la Defensoría del Pueblo.
En Bolivia no pueden siquiera enterrar a sus muertos. El fenómeno que altera la paz andina es nuevo: protestan todos. El descontento une a estudiantes hartos de modelos educativos que son herencia de dictaduras, a trabajadores que exigen mejores condiciones laborales y q quienes exigen el final de una escandalosa brecha de desigualdad; protestan los indígenas bolivianos y los afrocolombianos; protestan las mujeres, la comunidad LGTB, los sectores de la clase media que ven deslizarse el futuro hacia el sótano de la pobreza; en Colombia, donde los reclamos sociales estuvieron durante décadas a la sombra del conflicto armado, protestan los dirigentes campesinos ante el asesinato de sus líderes: 486 desde 2016, según la Defensoría del Pueblo.
En
el centro de las protestas están también las políticas económicas que casi no
hacen distingos ideológicos y desatan inflaciones galopantes, los sueldos de
políticos y funcionarios, siempre en las nubes comparados con el de los
trabajadores, y la omnipresente y expandida corrupción: el fantasma que recorre
América Latina.
Fue
la poderosa Central Obrera Boliviana la que pidió a Evo Morales que se fuera
del gobierno y el Comando Nacional Unitario que agrupa en Colombia a varias
centrales obreras, convocó a la movilización y a la huelga general contra el
plan económico del presidente Iván Duque. En Brasil, Jair Bolsonaro calificó de
terrorismo a todas las marchas pero, por si las moscas, suspendió su reforma
del sector público brasileño.
En
medio de esas tormentas, Uruguay está en un virtual empate técnico electoral
entre los blancos del Partido Nacional y el Frente Amplio. Se define el ganador
en horas. Y Alberto Fernández entró en tiempo de descuento hasta el 10 de
diciembre. Este es el volátil escenario que le espera. Sordos ruidos oír se
dejan…
ALBERTO
FERNÁNDEZ RECIBIÓ AL EMBAJADOR DE ESTADOS UNIDOS
Prado visitó
a Fernández junto a sus colaboradores y reiteró su disposición a ayudar con el
FMI. Venezuela y Bolivia en la agenda.
Página 12 de
Argentina )www.pagina12.com.ar)
El
presidente electo Alberto Fernández recibió en sus oficinas al embajador de
Estados Unidos, Edward Prado, con las formalidades del caso, que incluyó la
presentación de los equipos de que trabajarán en el vínculo bilateral. La
embajada norteamericana informó luego su predisposición a colaborar con el
próximo gobierno y habló de los deseos de mantener en pie la "relación
duradera" entre ambos países. Obviamente, en el encuentro se hizo un
repaso de la convulsionada situación regional en la que el presidente electo
dejó en claro su rechazo a una intervención extranjera en Venezuela y que lo
sucedido en Bolivia fue un golpe de Estado, por lo que no habrá reconocimiento
para la presidenta de facto Jeanine Añez, que no será invitada a su asunción.
Por caso, a Nicolás Maduro tampoco.
"Lo
más importante acá es lo gestual. No hicimos con ninguna otra embajada lo que
se hizo con Estados Unidos, está claro que el vínculo con la Casa Blanca está
en el tope de las preocupaciones para Alberto", comentaba uno de sus
colaboradores, que recordaba el antecedente del llamado que le hizo Donald
Trump unos días atrás. Aunque en esa ocasión quedó la idea de organizar una
reunión bilateral, eso no se tocó en el encuentro de ayer y parece difícil que
se concrete antes de fin de año dada la agenda de urgencias que deberá atender
Fernández en cuanto asuma la presidencia. Pero, como en aquel diálogo, los
norteamericanos de nuevo expresaron la intención de su Gobierno de colaborar en
las negociaciones que vaya a encarar con el FMI.
Hubo
dos partes de la reunión, en la primera no estuvo Fernández. Arrancó con el
próximo canciller Felipe Solá, el muy factible embajador en Washington Jorge
Argüello, el futuro jefe de Gabinete Santiago Cafiero y quien será encargado de
Asuntos Estratégicos o algo en esa línea, Gustavo Beliz. Prado llegó acompañado
de sus cuatro principales consejeros: la consejera general MaryKay Carlson, el
consejero político Chris Andino, el económico Tim Stater y el cultural Silvio
González. En ese tramo repasaron algunos temas generales sobre la relación
bilateral en un tono cordial.
Beliz,
por ejemplo, quiso saber sobre la continuidad de las misiones militares
norteamericanas y de las "bases" que en su momento se dijo que
Mauricio Macri había permitido instalar en el país. Pero los visitantes se
excusaron diciendo que los temas militares corrían por otra cuerda, aunque
aseguraron que no había bases en el país, sino simplemente misiones de entrenamiento
que se hacían tanto aquí como en Estados Unidos. "En general la reunión
fue en tono risueño, incluso se hicieron algunos chistes", comentó uno de
los participantes.
Luego
de ese tramo de presentación y repaso de temas bilaterales, llegó Alberto
Fernández. Respecto al tema Venezuela, repitió algunos de los conceptos en los
que dijo haber coincidido con el asesor especial de la Unión Europea para este
tema, el veterano diplomático español-uruguayo Enrique Iglesias. "Hay que
avanzar en una salida institucional negociada", definió. Lo mismo que su
oposición a un bloqueo comercial porque eso significaría profundizar la crisis
humanitaria que vive Venezuela. Iglesias se reunió el lunes con Fernández y
ayer mismo, más temprano, con Solá. El diplomático se mostró sorprendido por lo
visto en Venezuela, en donde dijo haber palpado lo que sea tal vez la crisis
humanitaria más profunda vivida por un país sudamericano. Por eso,
coincidieron, sería peligroso un movimiento que complique más lo que allí se
vive.
Respecto
al tema Bolivia, Solá recordó el repudio al golpe aprobado en la Cámara de
Diputados a instancias del bloque del peronismo. Por eso, subrayó que no habría
reconocimiento para Añez, ni será invitada a la jura del 10 de diciembre. No
obstante, dijeron que si hay una salida pactada entre todas las fuerzas
políticas para una nueva convocatoria a elecciones, la apoyarán. Quedó
claro que tanto en lo referido a Venezuela como a Bolivia la posición de
Fernández es bien diferente a la del Departamento de Estado, pero los
participantes del encuentro aseguraron haber encontrado comprensión de parte de
la Embajada. La nueva gestión busca un equilibrio: una posición regional de
línea progresista pero no necesariamente confrontativa con Washington, a la
manera de Uruguay y México.
Apenas
sobrevoló la cuestión del terrorismo. No quedó claro si hizo falta alguna
aclaración en el encuentro pero los colaboradores de Fernández dejaron en claro
que no está en sus planes analizar la derogación del decreto de Macri que declaró
a Hezbollah como organización terrorista. Fue exactamente lo que días atrás le
respondió el presidente electo a la embajadora de Israel, Galit Ronen, pero por
algún motivo luego hubo versiones periodísticas que afirmaron lo contrario. Si
bien en su momento desde el peronismo rechazaron que Macri califique así a una
organización que tiene representación política en el gobierno del Líbano,
ahora, revertir eso significaría entrar en una disputa innecesaria para una
gestión que arranca con muchas urgencias que atender.
LAS
LUCHADORAS BOLIVIANAS VUELVEN AL CUADRILÁTERO TRAS LAS PROTESTAS
Radio
Francia Internacional (www.rfi.fr/es)
Con
su falda aymara ondulante de un verde brillante, la luchadora Lidia Flores se
lanza desde la segunda cuerda del ring al aire libre y aplasta a su oponente
masculino.
Las
"cholitas" luchadoras vuelven al cuadrilátero del club Tiburones del
Ring, tras la suspensión de este espectáculo por dos semanas debido a las
protestas y bloqueos en El Alto, una ciudad en expansión colindante con La Paz.
La
ruidosa multitud de hombres mayores, mujeres jóvenes y padres con niños
pequeños, grita y lanza improperios mientras las indígenas luchan. Vestidas con
"polleras", faldas tradicionales de varias capas, y largas trenzas,
las luchadoras voltean, patean, golpean, tiran del pelo, en un espectáculo
caótico que a menudo sale del cuadrilátero.
Flores,
conocida en este mundo como "Dina, la reina del ring", dice que la
lucha libre es un bálsamo a la presión que soporta diariamente por su trabajo
como cocinera en un restaurante.
"La
lucha me desestresa", afirma Flores, de 44 años, poco antes de que empiece
el espectáculo y mientras reparte folletos a la gente que camina por un mercado
callejero cercano al club.
Después
de un parón de 15 días, esta madre de tres hijos y que lleva 12 años en la
lucha, se siente "muy ansiosa" por volver a los cuadriláteros.
"Con
estos problemas, con tantos bloqueos, que no había nada para comer, fue muy
estresante", asegura, con el bombín negro que lucen las mujeres indígenas.
Las
protestas tras las elecciones presidenciales del 20 de octubre, impulsadas por
la oposición que acusó a Evo Morales de haber fraguado su reelección,
dificultaron y pusieron en peligro la vida de los habitantes de El Alto, que se
erige a más de 4.000 metros de altura y bastión de ahora expresidente.
El
bloqueo de una planta de combustible se convirtió en una carnicería. Ocho
personas murieron cuando las fuerzas del orden cargaron contra los
manifestantes.
Dos
días después, la policía lanzó gases lacrimógenos contra una marcha en La Paz,
en la que los manifestantes portaban cinco de los cadáveres en ataúdes para
pedir justicia y la dimisión de la presidenta interina, Jeanine Áñez, que se
autoproclamó en el cargo después tras la renuncia el 10 de noviembre de
Morales, quien se exilió en México.
"Fue
la primera vez (en ocho años) que tuvimos que parar por un conflicto",
explica la organizadora del espectáculo, Marie Peñaranda, de 30 años, mientras
vende entradas por 20 bolivianos, unos 3 dólares.
Las
tensiones aflojaron el fin de semana tras la aprobación de una ley para
convocar nuevas elecciones y las conversaciones que mantienen el gobierno
provisional y los manifestantes con el fin de detener los disturbios.
Ana
Luisa Yujra, más conocida en los cuadriláteros como "Jhenifer dos
caras", dice que el espectáculo es un terapia "asequible" para
la gente después de tanta violencia.
"Me
encanta demostrar la habilidad, la agilidad y la capacidad que una mujer puede
tener", dice esta enfermera geriátrica.
-
"Rudo pero interesante" -
Flores,
vestida con un chal del mismo tono verde chillón de su falda, sube al ring y
arroja su bombín al suelo.
En
su preparación para el combate de parejas mixtas contra Yujra, la luchadora
realiza un par de saltos mortales que dejan al descubierto las capas de su
"pollera" y su ropa interior.
Martha
Mayta, de 28 años, se sienta en primera fila cautivada por el espectáculo.
"Me
gusta cómo luchan, cómo hacen sus estoques, con las polleras, es increíble; me
pongo a pensar cómo las mujeres con pollera pueden luchar en estas
posiciones".
"Es
una demostración para nosotros de que una mujer se defiende a sí misma de los
hombres", explica Norah Martínez, de 34 años.
"Parece
rudo, pero es algo interesante".
Después
de un combate salpicado de referencias a la crisis política que afecta al país,
Yujra y su compañero masculino, vestido con pantalones rojos brillantes y
camiseta a juego, son declarados ganadores.
Visiblemente
exhausta y desaliñada, Flores lanza besos a sus seguidores mientras abandona el
ring en dirección al improvisado vestuario.
"Me
siento mal", reconoce. "Estoy realmente cansada y sin aliento".
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